Mi nombre es Alex, aunque tardé años en ser consciente y decirlo en alto, sufrí abusos sexuales durante mi infancia y hoy trabajo por visibilizar y erradicar el abuso sexual infantil, una realidad incómoda que sigue muy vigente en nuestra sociedad. ¿Cuándo se empezará a aplicar la Ley Rhodes para dar un paso en esta lucha?.

Uno de cada 7 niños y una de cada 4 niñas sufre, está sufriendo o sufrirán acoso sexual antes de llegar a la mayoría de edad, además la mayoría de los casos proceden o procederán de una persona cercana al entorno de la víticma. Un dato desolador.

Los menores que sufrimos acoso sexual tardamos muchísimos años por lo general en darnos cuenta de lo que pasó y más tiempo aún en ser capaces de hablar de ello y denunciarlo, por eso es importante que los delitos no preescriban tan pronto como antes lo hacían y las nuevas medidas aprobadas como propuesta de ley el pasado junio se empiezen a poner en práctica.

A pesar de que cada vez hay más conciencia social alrededor del acoso sexual infantil, esto no se está traduciendo en un cambio sistémico ni en una reducción de casos, es esencial ir más allá, desde un cambio en la educación y crianza de los más pequeños hasta un endurecimiento de las penas y una reinsercción eficaz que evita la reincidencia.

Por eso quiero dirigir esta campaña a los políticos del Congreso de los Diputados para preguntarles cuándo de pondrá en marcha las medidas propuestas en la llamada Ley Rhodes que incluye aaspectos tan importantes como la obligación de declarar en caso de conocer un caso de abuso infantil, facilitar la activación de protocolos por abuso en la escuela o la prueba constituida para evitar que las vítcimas tengan que dar su declaración ante varias cámaras.

El silencio es el mayor cómplice que existe del abuso y la sociedad lo potencia. Yo huí fuera del país, mi cabeza borró recuerdos durante años, hasta que fui capaz de hablar de mi caso y cree la Asociación Reach para concienciar y educar sobre la prevención del abuso sexual infantil a través exposiciones educativas y apoyo a víctimas que lo han sufrido.

Un 74% de lxs docentes se han encontrado con situaciones de abuso en su vida profesional, de todos ellos solamente el 15% lo han denunciado, se quedan un montón de víctimas por el camino por falta de una figura que active los protocolos necesarios y formación del profesorado.

La educación es clave para reducir los casos, detectar posibles agresores antes de que cometan un abuso, hacer que los niños y las niñas conozcan su cuerpo y los límites que tienen que decidir sobre el mismo y por supuesto una formación específica para las fuerzas de seguridad y los jueces que deben aplicar la ley de manera adecuada.

Todo el mundo tiene derechos humanos y a la reinserción, pero eso no se puede traducir en impunidad de los agresores o en condenas ridículas que envían el mensaje de que sale muy barato ser un agresor. Parece que existe una ley que puede allanar el camino hacia una sociedad mejor, ¿por qué no empezamos a aplicarla?