Sobre mi salario y un poco sobre transparencia y crisis
Hola Rubén, disculpa el retraso en la contestación. Te envío esta respuesta con un adelanto de la que queda pendiente por contestarte y a la que te prometo responder en nada.
Creo que lo mejor es que veas lo que cobra un diputado de IU en este enlace: http://www.izquierda-unida.es/transparencia
Aquí podéis encontrar todos los datos referentes a nuestros salarios, bienes y actividades que considero personalmente más que dignos (me refiero al importe neto que los diputados/as de IU percibimos final y realmente, en mi caso 2.531 €).
Como sabes nosotros/as cumplimos con una carta financiera desde siempre que implica que parte de nuestro salario lo aportamos a la organización. Esto conlleva que, en ocasiones, haya compañeros y compañeras que cuando aceptan dar un paso adelante en la política pierden poder adquisitivo y esto me permite aportarte alguna reflexión sobre el debate del salario de la gente que se dedica a la política.
Yo creo que cualquier salario debe ser digno y acorde a la responsabilidad y el trabajo desarrollado, es más, creo que para poder hacer bien tu trabajo debes tener las condiciones oportunas de tiempo y medios necesarias y, por lo tanto, dedicarte (como en cualquier ocupación) por completo, lo que implica que debes cobrar por ello.
¿Cómo sino un trabajador/a por cuenta ajena (yo mismo) podría representar a los millones de trabajadores/as como él o ella en el Congreso sino es porque dispone de un salario? Aunque parezca de perogrullo es bueno empezar por esta reflexión ya que todos aquellos que dicen (como Cospedal) que hay que quitar el salario de los cargos públicos y recortarlos lo único que persiguen es que precisamente la gente de la calle, asalariada, no pueda acceder a ocupar espacios de decisión y poder.
Un mecánico por ejemplo (como ocurre con un compañero en el Ayuntamiento de Zaragoza) que dio el paso y es concejal para defender los intereses de los y las trabajadoras y que dejó su trabajo anterior para dedicarse por completo a ello, no podría haberlo hecho sin remuneración.
Lo contrario sería el gobierno de aquellos que no necesitan trabajar para ganarse la vida, es decir que no viven de las rentas de su trabajo y por lo tanto ya os podéis imaginar de qué. O peor de aquellos que no cobran del estado pero cobran de otros intereses a los que obviamente defenderán y para los que trabajaran cuando tengan responsabilidades políticas. ¿Te suena lo de las puertas giratorias? ¿El escándalo, por ejemplo, de las eléctricas en este país?
En política el dinero no puede ser jamás un elemento que empuje o impida asumir una responsabilidad en una institución.
Bueno pues llegados a este punto yo creo que el problema es qué se considera como salario justo y qué no (en política y en todo, tanto el mínimo como el máximo), y cómo debemos garantizar que el hecho de que las retribuciones de un servidor/a público/a cualesquiera sean de dominio público con normalidad, no sea algo a evitar o a jalear en exceso ¿para qué? Mi padre siempre me decía cuando obtenía buenas notas que no hacía otra cosa que mi trabajo.
Pero hay más, si nos quedamos aquí simplemente estaremos situando los focos sólo sobre los/las políticas, asumiendo que con garantizar que lo que se ha venido a llamar transparencia llegue a la política estaremos salvados.
Y eso es a mi juicio es un error. La llamada clase política no es otra cosa que un exponente más de la sociedad que nos ha tocado vivir y que muchos y muchas queremos cambiar.
El diseño de las estructuras opacas y nada participativas en las que nos movemos las personas que estamos en esto, están pensadas para que la gente se sienta ajena a la "cosa pública" y la vea de lejos.
Sumado a eso la propia definición de "poder" que se ha venido construyendo (en algunas ocasiones en la práctica, y mayoritariamente en el imaginario colectivo) a lo largo del tiempo profundiza en ese divorcio entre “electos y electores”.
Lo lamentable es que la exclusividad, la fama, el individualismo, los privilegios que persiguen algunos, quizá demasiados, representantes públicos son también aspiraciones de muchos de los individuos que conformamos la sociedad. Este es el principal problema.
Por eso la superación de esta poliédrica crisis sólo se producirá a favor de la mayoría social cuando todos y todas repensemos (desde lo individual) los valores que queremos imperen en lo colectivo.
Para cambiar las cosas debemos comprometernos todos y todas exigiéndonos lo mismo que exigimos y dando lo mismo que pedimos.
Por eso la transparencia en los salarios pero también en la forma de hacer día a día, debe ser un compromiso de todos y todas a todos los niveles más allá de leyes y portales.
En cualquier caso es solo una reflexión, aquí os dejo un par de enlaces en los que podéis ver nuestras propuestas contra la corrupción y por la transparencia:
http://www.izquierda-unida.es/sites/default/files/doc/45_Medidas_Contra_Corrupcion.pdf
http://www.izquierda-unida.es/sites/default/files/doc/Enmienda_Totalidad_Ley_Transparencia_21_05_2013_0.pdf
Un abrazo
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