Hola, soy Ángel. Mi vida cambió el pasado 24 de mayo de 2020 cuando, después de una zambullida fallida en una piscina privada, sufrí una lesión medular a nivel cervical importante. Estuve seis meses en el Hospital de A Coruña ingresado, empezando con la rehabilitación allí durante el mes de mayo, recibiendo el alta en noviembre. En el momento de salir del Hospital no me dieron más esperanzas y con ello finalizaba mi rehabilitación, aunque pedí poder continuarla. Se negaron, ya que decían que “todo lo que iba a conseguir ya lo había hecho allí".

A día de hoy sigo acudiendo cada día a la clínica de Belén (Neurostep Fisioterapia) para que me trate. Encontrarla en este camino ha sido fundamental. Nos conocimos en el Hospital, le pregunté las posibilidades de continuar el tratamiento con ella pagándolo de mi bolsillo.

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Ahora mismo dependo de una tercera persona para hacer todo. Mi vida ha cambiado por completo, estoy incapacitado y ya no trabajo, pero lucho por ser cada día lo más independiente posible. 

Por eso reclamo que la Seguridad Social nos ofrezca esa asistencia. De una lesión así no se puede salir, pero se puede mejorar. Las lesiones no tienen cura y son para siempre, pero con trabajo duro y constante se puede mejorar más de lo que en un primer momento te dicen.

Además hace falta invertir de forma decidida en la investigación para mejorar la vida de las personas que nos encontramos en esta situación. 

Por eso solcito a los políticos que se pongan a ello y nos ayuden: les instamos a que rubriquen sus compromisos en este asunto.

A todos los demás os agradezco mucho el apoyo a este tema, pidiendo que lo difundáis por todas vuestras redes. Juntos lo conseguiremos. Muchas gracias a todos.

Súmate a esta iniciativa ¡todos ganamos!