Unas 1.000 personas son laringectomizadas cada año en nuestro país. Una intervención complicada que deja muchas secuelas y cambia por completo nuestras vidas: perdemos la voz y tenemos que aprender el habla esofágica para comunicarnos. 

Ser una persona laringectomizada supone un cambio radical en nuestras vidas y desde ARMAREL (Asociación Regional Madrileña de Atención y Rehabilitación de Laringectomizados) trabajamos junto con otras asociaciones de nuestro país para acompañar y asesorar a este colectivo en todo este duro proceso: contamos con un logopeda y asesoría jurídica. 

Nuestro trabajo también es que nuestro colectivo no sea abandonado por la administración pública. A pesar de que estemos viviendo una crisis sanitaria sin precedentes tenemos reivindicaciones históricas para que no seamos un colectivo abandonado. 

Como muchas personas laringectomizadas saben por experiencia, urge que exista un protocolo médico más completo que nos atienda tras pasar por una operación como esta, que requiere mucho tiempo de recuperación. Muchos pacientes se tienen que “buscar la vida” después de la intervención para encontrar asociaciones como las nuestras, que les asesoren en el proceso de la rehabilitación logopédica.

CAMPAÑA APOYADA POR:

Es necesario que nos unamos para reclamar un protocolo médico a nivel nacional que contemple que la sanidad pública cubra todas nuestras necesidades:

-Rehabilitación logopédica para aprender a comunicarnos con el habla esofágica. En algunos hospitales existen estos servicios de logopedia pero las sesiones siempre son insuficientes. 

- Acompañamiento psicológico durante todo el proceso: reconstruir nuestras vidas después de este trance no es fácil, estar laringectomizado afecta a nuestras relacionales sociales, familiares y también dificulta muchísimo la reinserción laboral.

-Tratamientos de fisioterapia y seguimiento tras la operación.

Además, también queremos reclamar que el sistema sanitario subvencione los filtros Micron, que necesitamos poner en nuestros estomas para protegernos del virus. Estos filtros son para nosotros las mascarillas, nuestra barrera para protegernos del Covid y otras bacterías. Una caja de 30 de estos filtros especiales cuesta aproximadamente 130 euros. Por el momento, sólo Navarra los subvenciona y esta medida debería extenderse a todas las comunidades para que todos seamos iguales. 

Nuestras reivindicaciones son coherentes y comedidas: no queremos nada más que la atención y la ayuda que merecemos. Por eso ponemos en marcha esta petición que queremos hacer llegar al Congreso de los Diputados. Unidos seremos más fuertes: otros colectivos, plataformas y asociaciones de laringectomizados están invitados a unirse. Firmando y compartiendo nuestra propuesta seremos escuchados.

ACTUALIZACIÓN:

Desde la AEEORL (Asociación Española de Enfermería Otorrinolarigología y Cabeza y Cuello)  nos adherimos a esta petición y proponemos que estas personas tengan derecho a disponer de una Atención Integral que cubra el  Antes,Durante y Después, de ser intervenido desde el mismo centro hospitalario a través de una Consulta de Enfermería q coordine todas sus necesidades de cuidados para conseguir recuperar al máximo su calidad de vida.