Me llamo Sara y soy de Barcelona. Durante 26 años he trabajado en la sanidad pública, la mayor parte del tiempo en un trabajo desconocido para la gran mayoría de los pacientes pero de vital importancia para su seguridad y su salud, así como para el funcionamiento de cualquier hospital. En la central de esterilización. 

Me gusta resumir lo que se hace en esos departamentos como el “corazón” de un hospital. Sin el buen funcionamiento de ese trabajo podría fallar todo el proceso. Las centrales de esterilización se encargan de manejar toda clase de materiales reutilizables y de un solo uso para servir a varios departamentos de los centros sanitarios. Desde los quirófanos, principalmente, a las consultas externas o los materiales que se utilizan para los pacientes con leucemía, por ejemplo. 

Se trata de un trabajo especializado que requiere mucha formación y que no puede hacer cualquiera. La salud de los pacientes está en juego también cuando se trata de esterilizar material sanitario, si los procesos no se siguen escrupulosamente no se puede garantizar la seguridad. 

A lo largo de mis años de profesión he luchado junto a otros compañeros y compañeras por sacar adelante mi trabajo con el máximo rigor. Somos muchos profesionales, unos 5.000 en toda España, los que reivindicamos la profesionalización de nuestro trabajo a través de la creación de una titulación específica de un grado superior de técnicos de esterilización. 

Cuando falta personal o hay vacaciones, muchos centros suplen esas bajas en los centros de esterilización con profesionales que no tienen la experiencia ni la formación necesaria para estar en una labor así. Estas situaciones deberían evitarse porque conllevan riesgos, que en última instancia y debido a errores humanos podrían derivar en infecciones y otras complicaciones médicas para los enfermos. 

La creación de una titulación específica es una reivindicación histórica de nuestra Asociación de Auxiliares de Esterilización Sanitaria.

 Lo hemos reclamado ya tanto al Ministerio de Educación como al Ministerio de Sanidad y nos volvemos a movilizar para seguir luchando por el reconocimiento de nuestra profesión y por la salud y la seguridad de todos. Para ser escuchados necesitamos tu ayuda: firma y difunde esta campaña para que tengamos respuestas.