Me llamo Blanca, tengo 21 años, soy de Valencia y este a este año me gradúo en Periodismo. Como la gran mayoría de jóvenes en España me preocupa mi futuro laboral.

La llegada de la pandemia de la Covid ha puesto de relieve las pocas expectativas laborales que se les presentan a los jóvenes. Los menores de 25 años fueron los primeros en caer del mercado laboral y entrar en el círculo de acumulación de contratos temporales y trabajos precarios.

En mi clase somos unos 60 alumnos y a lo largo de estos cuatro años de carrera la desmotivación ha hecho que tan solo unos pocos queramos seguir adelante e intentar trabajar como periodistas en España.

He tenido suerte de que mis padres puedan apoyarme y ayudarme mientras estudio. Gracias a ellos he podido rechazar trabajos precarios que no eran justos y no estaban remunerados. Sin embargo, muchos estudiantes necesitan trabajar para poder costearse los años de carrera y ayudar a su familia.

Por ello “Nini”, esa palabra despectiva dirigida a jóvenes que no quieren trabajar ni estudiar, ya no hace referencia a la realidad actual a la que nos enfrentamos porque si no quieres estudiar sí quieres trabajar y labrarte un futuro, el problema es el encontrar trabajo.

Este año termino mi carrera y me enfrento a un mercado laboral al que sólo voy a poder acceder, y con suerte, a prácticas en empresa porque en la mayoría de ofertas de empleo piden experiencia demostrable y, sin experiencia no hay trabajo y, sin trabajo no hay experiencia. Las empresas deberían invertir en talento porque nosotros los jóvenes podemos aportar creatividad, ganas y puntos de vista que mejoren el trabajo.

Al final, tener vocación por tu trabajo es bonito, y la tengo, pero si no encuentro un trabajo no voy a poder ser independiente y desarrollarme dentro de la sociedad y ¿por qué no puedo tener esa oportunidad?

Inicio esta campaña para pedir a los políticos del Congreso de Diputados que regulen los contratos en prácticas de las empresas para que los derechos de los jóvenes estén reconocidos y se obtenga una remuneración por el trabajo desempeñado. Además de instarles a llevar a cabo medidas para incrementar nuestras oportunidades de acceso al mercado laboral y que se premie la contratación de talento.