Soy Carlos y mi hija es autista. Siempre he querido aportar mi apoyo a una situación que está presente en un motón de niños y familias. Aunque cada caso es diferente al resto, las condiciones y la atención a las personas autistas es pésima y por ello quise desarrollar junto a mi familia un proyecto solidario para apoyar la causa.

BycicleTEA, es el nombre del proyecto al que doy forma. Tratamos de dar visibilidad al autismo a través de la participación en pruebas deportivas como carreras. Además, utilizamos una equipación con el slogan “En el autismo rendirse, no es una opción”. Con esta equipación, las personas pueden comprarla, y destinemos el beneficio recaudado de las ventas a proyectos relacionados con el autismo o tengan como objetivo favorecer la ayuda de las personas con TEA.

Por otro lado, el aspecto económico es muy importante. Hay que tener en cuenta que este proyecto está autofinanciado, aunque tenemos la suerte de que unos pequeños patrocinadores puedan ayudarnos a financiarlo. 

Hablando de dinero, nosotros como sociedad debemos de conocer los altos costes de terapias para el autismo. He tenido que destinar mucho dinero a las terapias y tengo constancia de que muchas otras personas no se pueden permitir el alto coste de estas terapias.

A esto hay que sumarle la mala gestión y atención de la sanidad pública. El servicio de neuropediatría de la sanidad pública hace un seguimiento del caso sin aportar nada a las familias, por no hablar de la distancia temporal entre cita y cita. Es escasa la información respecto a las posibles ayudas que puedan tener personas con TEA y sus familias, así como los farragosos procesos burocráticos para todo ello.

Por todo ello, pido y visibilidad y ayuda por parte de Castilla La Mancha que es donde resido. Queremos una buena atención psicológica, atención de logopeda financiada por la sanidad pública y muchos otros gastos que suponen el tratamiento del autismo en cualquier persona.