Me llamo Carlota y vivo en Catalunya. Yo no tengo antecedentes con cáncer de mama, pero al tener mis hijos con 37 y 39 años, decidí someterme a revisiones ginecológicas anuales. Como la Seguridad Social no las asume hasta que las mujeres tienen 50 años, me las hago mediante el servicio privado. En enero del año 2020, durante una de estas revisiones, me hicieron una mamografía. En el resultado apareció una posible alteración, así que me pidieron una ecografía mamaria. Cuando me la hicieron, el ecógrafo consideró que era necesario que valorara el resultado con mi ginecólogo, que me informó que no había nada por lo que alertarse.

Pasó la pandemia de la Covid-19 y volví a la consulta después de un año, para someterme a la revisión anual de 2021. Al momento que me hicieron una ecografía mamaria, decidieron practicarme también una biopsia de urgencia. Entonces me informaron que padecía un cáncer de mama hormonal que se encontraba en estadio 3. A partir de este momento, me empecé a tratar mediante la Seguridad Social. Me hicieron todo tipo de pruebas y concluyeron que tenía un tumor que medía aproximadamente 2 cm y otro de unos 6 mm. Me operaron en julio por primera vez; no tuvieron que quitarme el pecho, pero tuve que someterme a una segunda intervención quirúrgica en agosto. También me quitaron el ganglio centinela que por suerte no estaba afectado.

Cuando pasé a la unidad de oncología, los médicos me informaron de que mi tipo de tumor se encontraba en una línea entre ser de bajo riesgo o ser de alto riesgo, así que se estaban planteando si someterme a un tratamiento de quimioterapia o si no. A modo preventivo, finalmente decidieron hacerlo. En septiembre empecé los seis ciclos que compusieron mi tratamiento y después recibí 20 sesiones de radioterapia.

Los tratamientos fueron muy duros y me afectaron mucho a nivel físico. Me encontré muy mal. Por lo que se refiere al cuidado del estado anímico, he tenido la suerte de contar con el servicio que proporcionan algunas fundaciones privadas. En el hospital te indican que existe el acompañamiento psicooncológico, pero no apuestan para hacerlo accesible. Considero que este es un aspecto imprescindible a mejorar. Creo que las instituciones deberían invertir a favor de garantizar que todos los pacientes oncológicos cuentan con ello. También considero que se debería de trabajar a favor de quitar el estigma social que tiene la palabra cáncer porque muchas veces es trabajo nuestro, estar al lado de la gente que nos rodea para que se sientan tranquilas con la situación. El cáncer es una enfermedad del día a día y no puede ser que no se hable de ello.

Por lo que se refiere al aspecto económico, quiero destacar que el proceso de enfermedad me ha hecho percatar de que hay un seguido de aspectos que no se pueden obviar para tratar la enfermedad, los efectos secundarios de los tratamientos o el estado anímico; que no se financian a nivel público y que en general son costosos: la piel se reseca y necesitas cremas, los pañuelos, las pelucas… todo esto se lo tiene que pagar cada persona de su bolsillo. Por ejemplo, yo no me he podido hacer tratamientos complementarios para conllevar de una manera positiva los tratamientos porque no me lo he podido permitir y he tenido que pagar párquing cada vez que he tenido que desplazarme de mi hospital a otro para someterme al tratamiento de radioterapia. En resumen, considero que hay un seguido de cosas que no se ven de entrada, como por ejemplo el aspecto laboral y la revisión de las bajas o bien todo lo que se relaciona con las ayudas económicas y que creo que se tendrían que poner sobre la mesa.

Lo presentado, además de la necesidad que hay de que se reduzca la edad en la cual empieza el cribado para detectar el cáncer de mama público en personas que no tienen antecedentes, teniendo en cuenta que la edad se puede relacionar con el pronóstico, ya que cuanto más jóvenes sean las pacientes más rápido crecen los tumores debido al aspecto hormonal, es lo que me lleva a dirigirme a los políticos del Parlament de Catalunya: ¿Por qué no se adelantan las pruebas de cribaje públicas a una edad coherente con los casos que tienen peor pronóstico y se asumen los gastos extra que conlleva el contexto de enfermedad?