Hola, mi nombre es César y estoy formándome en el Conservatorio Superior de Música en Madrid. Desde los 9 años me he ido especializando en este sector, y lo cierto es que tiene cosas muy buenas y otras que se repiten generación tras generación. Es una pena, esta profesión es una en las que más se sufre mentalmente. Sobre todo, cuando te estás formando, no es accesible para muchas personas, ya que “la enseñanza pública” es privatizada por algunas como explicaré a lo largo de este testimonio. Y el gran problema es que al final, este tipo de situaciones se normalizan, nadie denuncia ni la obsolescencia de cara a las asignaturas, la falta de formación para lo laboral, las vejaciones, los abusos sexuales y psicológicos a muchos estudiantes, etc.

La percepción social hacia la música muchas veces es negativa. No todo el mundo considera la profesionalización del sector como una carrera. Tampoco se tiene en cuenta que las personas que estudian para ser músicos lo tienen que compaginar con las formaciones educativas básicas. Y, cuando accedes, y vas creciendo y queriendo formarte más, te das cuenta del caciquismo que existe. En los tribunales de acceso a los conservatorios superiores, además de ser pocas las plazas, muchos entran por “conocer a x profesor”. Siendo los componentes de los tribunales los que dan clases particulares, para por una parte aprovecharse de los músicos que quieren acceder y por otra, para tener el poder de elegir quienes entran y quienes no. 

Este tipo de situaciones genera un ambiente muy tóxico ya que compites con tus compañeros bajo este sistema de presión, en el que en vez de hacer piña y ayudarnos entre todos denunciando esta situación, prima el "sálvese quien pueda". Además, la sociedad tampoco te apoya ya que considera que tu trabajo no vale tanto o que deberías hacerlo gratis. Y a esto, le sumas las instituciones, que o bien no quieren informarse de lo que pasa o directamente lo saben y prefieren mirar hacia otro lado. Pero lo cierto es que la situación sigue año tras año. Hay algunos profesores que se aprovechan de los alumnos, y no solo en lo económico, porque son demasiados los casos de abusos sexuales que se cubren al año para que no salgan a la luz y dañen así la imagen del centro en el que trabajan.

Para mejorar este sector en el ámbito económico se debería entender que necesitamos regularizaciones específicas para nuestro trabajo. Al final no es normal que no exista una regularización del IVA o de las tasas de autónomos de cara a los músicos. YY lo cierto es que muchas personas acaban trabajando en negro porque hacerlo por lo legal te hace ganar una miseria. Generando así que la situación de las personas que nos dedicamos a esto sea más precaria que nunca, que no te dé para vivir y menos para formar tu familia o tener tu casa, tu coche, etc. 

El mantenimiento del equipo, las cuotas de autónomo, el IVA, poder vivir de tu profesión. No tienen en cuenta el daño moral que genera dedicar toda una vida de estudio y trabajo a esta profesión, para que una vez salgas al mercado laboral te encuentres con esta realidad tan triste. Ser músico es dedicar tu vida para que cuando llegas al mundo laboral no tengas apenas ningún fruto por todo tu trabajo. Produce impotencia, ya que amas tu profesión, pero parece que vives para morir de hambre, irremediablemente. Y hay un completo desconocimiento de nuestra situación porque tampoco tenemos revistas o medios que se hagan eco de este secreto a voces que todos sabemos, pero del que nadie quiere hablar.

Hay muy buenos profesores, no todos comenten estas prácticas abusivas hacia sus alumnos. Pero lo cierto es que hay una mafia en este sector que se lucra de jóvenes con sueños y ansias de vivir de la música. Y ves de todo. Desde “clases extraoficiales” hasta cursos a los que si no asistes, te será muy difícil pasar la prueba de acceso. También faltas de respeto hacia los estudiantes, haciéndolos sentir inferiores como si no valieran nada… Y sumamos más y más cosas. Mientras cada vez son menos los músicos que pueden vivir de su profesión y más los que acaban con traumas que les acompañarán de por vida.

La gente no sabe realmente lo que hacemos, algunos nos toman como "los raritos que hacemos música", no se suelen hacer eco de lo que pasa. Muchas personas se están aprovechando de la situación, es algo que se repite. Me duele decir esto, pero creo que actualmente no hay ni un solo medio de comunicación musical que hable sobre todos estos problemas. A veces me da la sensación de que solo son escaparates, un panfleto publicitario. Es triste, si no le damos visibilidad todo esto seguirá ocurriendo. Es muy importante que se empiece a tener consciencia de que esto sucede. No todos los profesores cometen este tipo de praxis ni sucede siempre, pero está normalizado. Por eso me gustaría preguntarle al Congreso de Diputados, soy músico y estoy cansado de ver las injusticias que se cometen en nuestro sector. ¿Por qué las instituciones no se implican y cambian este sistema caciquista en el que vivimos?

Muchas personas tienen miedo a las consecuencias, pero no son tantas como creen. Podemos cambiar la situación, es tan sencillo como cumplir la ley, ni más ni menos. Hace falta más inspección, regularización, etc. En lo económico no creo que sea muy difícil encontrar una solución, solo hay que regular ciertas cosas. En lo educativo quizás sea efectivo endurecer las inspecciones. Al final si todos estos problemas no se solucionan es por pereza, no creo que necesitemos dinero, solo actitud. Por eso te pido a ti que estás leyendo esta petición que actúes y firmes para poder cambiar todo lo que estamos pasando.