Soy Charlie y soy superviviente de un sarcoma de Ewing.

Me lo diagnosticaron cuando tenia 16 años. Al principio los médicos pensaban que era ciática y después escoliosis tras las primeras pruebas. Pero después de una resonancia vieron que se trataba de un sarcoma de Ewing en la cadera.

Estuve once meses con tratamiento de quimioterapia que funcionó muy bien. El sarcoma dejó de tener actividad y estaba prácticamente eliminado. Estuve completamente bien durante un año, pero al tiempo empecé a sentir muchos dolores de cabeza y a encontrarme mal en general, así que pedí a mis médicos que me hicieran una resonancia.

En la resonancia vieron que tenia el mismo tipo de sarcoma en las meninges de la cabeza. Me operaron el marzo pasado para quitármelo y volví a entrar en la espiral de los tratamientos de quimioterapia. Terminé hace dos semanas el tratamiento y ya estoy bien.

Esta enfermedad es un tipo de cáncer considerado raro que suele afectar en mayor medida a niños y a adolescentes. También es uno de los cánceres más agresivos. Es un tipo de cáncer al que afecta mucho los tratamientos de quimioterapia, el tumor desaparece al recibir el tratamiento, pero después de un tiempo, vuelve a aparecer, como a mi me ha sucedido.

Tanto los pacientes como nuestras familias, necesitamos y pedimos una mayor inversión de recursos en llevar a cabo investigaciones sobre nuevos tratamientos y terapias para la cura del sarcoma de Ewing. 

Específicamente es necesario que se amplíen los recursos destinados a la prevención y las pruebas preventivas ante las posibles recaídas que se nos realiza a los ex pacientes oncológicos. Sobre todo en los tipos de cáncer que, como el sarcoma, son más proclives a reaparecer.