En el comité de empresa de Prisa Media, compañía transversal integrada por casi 350 empleados de las distintas cabeceras del grupo, hemos convocado una huelga para pedir un convenio digno. 

En diciembre nos pusimos en contacto con la dirección de la empresa para negociar medidas para paliar la subida del IPC. Nos dijeron que sí, pero que había que firmar un pequeño acuerdo para unificar los 9 convenios colectivos que están actualmente activos. Sin embargo, la realidad es que ese acuerdo se iba a convertir en un convenio colectivo y nos querían quitar algunos de los derechos que ya tenemos actualmente.

 

A día de hoy, la mayoría de los empleados se incorporaron por subrogación y mantienen las condiciones de trabajo de las cabeceras de Prisa de las que procedían. No hay un convenio de PRISA MEDIA. 

Por ello, reclamamos la aprobación de un convenio que contemple 36 horas semanales, cheques de comida para todos los empleados (no solo para los que ya lo tenían) o ayudas para los comedores integrados en la propia empresa, compensación de las horas extras “en una proporción justa”, jornadas intensivas en verano, Semana Santa y Navidad, y una ampliación del número de grupos salariales con opción a tener un plan de carrera.  

Queremos que Prisa reconozca la posibilidad de que los trabajadores teletrabajen un mínimo de dos días por semana, y que esta práctica no pueda ser reversible por decisión unívoca de la empresa. Hay que tener en cuenta que en Prisa Media trabajan 340 trabajadores -300 en convenio y 40 fuera- que realizan distintos servicios transversales dentro del grupo. 

Las condiciones propuestas desde los despachos precariza a la mayoría del personal, aumentando las horas efectivas de trabajo. Además, elimina derechos que tienen los trabajadores para las nuevas contrataciones. 

Nos gustaría que el Congreso de los Diputados se hiciera eco de nuestra situación.