Mi nombre es Daniel y en el colegio sufrí una discriminación múltiple: por ser un niño adoptado de origen ruso y debido a mi orientación sexual. Actualmente mi sueño es ser profesor de infantil para acabar con este tipo de actitudes educando en respeto y tolerancia a los más pequeños. ¿Cuándo se impartirá una educación en valores real y obligatoria para todos los centros educativos?

Salí del armario públicamente a través de mi cuenta de Instagram cuando tenía 16 años y empecé a darme cuenta de que la gente me miraba y me trataba de manera diferente. Para mi sorpresa los chicos más listos de mi clase fueron los primeros en reaccionar de manera despectiva, ahí es cuando me di cuenta de que algo fallaba en el sistema educativo. Si se supone que las personas que sacan mejores notas tendrían que ser más racionales ¿por qué ese odio irracional hacia la diferencia?

Formación tenemos, educación yo creo que no. Llegados a este punto, veo la necesidad de impartir clases de valores éticos desde infantil como una asignatura troncal en la que se enseñe a respetar al resto independientemente de su país de origen, orientación, expresión e identidad sexual o ideología. 

Creo que la educación es la base de todo. Si desde pequeños nos enseñaran la diversidad de opciones sexuales y de género que hay normalizaríamos que existen personas con diferentes orientaciones, expresiones e identidades sexuales y de género. Es importante concienciar a los adultos, pero, si no regeneramos la sociedad desde la base nunca se acabará de normalizar y visibilizar como es debido. 

Es cierto que ya se ofrecen charlas de educación sexual, pero generalmente solo te enseñan a cómo poner un preservativo, dejando de lado la sexualidad en su conjunto. ¿Por qué estas charlas hacen alusión tan solo a los problemas de las parejas heterosexuales obviando al colectivo LGTBIQ+?

Todos los niños y niñas tienen que tener la oportunidad de aprender esto. Tendríamos que poder tener acceso a la máxima información y lo más amplia posible. Debemos rechazar ideas que limiten nuestro conocimiento como el PIN Parental y centrarnos en ampliar el sistema educativo para que quepamos todos y todas. 

Por eso desde aquí quiero dirigirme al Congreso de los Diputados para pedir que se imparta una educación en valores y diversidad desde infantil, se deje participar en los centros educativos a personas del colectivo LGTBIQ+ para que ofrezcan representación y visibilidad del mismo y se eduque para acabar con el racismo y la xenofobia para que ningún niño o niña tenga que sufrir acoso por esto otra vez.