¿Cuándo se tomarán medidas que garanticen una mayor implicación de todas las redes sociales para prevenir y abordar el ciberacoso, como por ejemplo una mejor comunicación con la policía?
Me llamo Jorge, soy de Elche (Alicante) y soy analista informático internacional en ciberdelincuencia y ciberdelito. Actualmente soy autónomo y me dedico a asesorar y ayudar a víctimas de cilberdelitos de todo tipo, desde estafas hasta ciberacoso a menores (grooming) o chantajes sexuales (sextorsión).
Un tema que trato mucho es el del acoso a través de redes sociales. Es un problema que está a la orden del día, que afecta tanto a personas adultas como a adolescentes. Con el aumento del uso de las redes, especialmente durante la pandemia, este tipo de acoso ha ido también aumentando.
Cuando una persona es acosada por otra de forma presencial, la víctima tiene mucha más información sobre su acosador: su rostro, su ropa, por dónde lo ha visto… Todo esto es muy relevante a la hora de poner una denuncia, y así es más fácil encontrar al acosador y tomar las medidas necesarias. El problema del ciberacoso es que todo esto no se sabe: un ciberacosador puede esconderse tras cualquier cuenta, e incluso puede ir borrándola y creándose cuentas nuevas.
Los ciberacosadores se esconden tras esa falsa seguridad del anonimato, pensando que no les podrán encontrar, aunque esto no es así: si se tiene el conocimiento y las herramientas, no es tan difícil rastrear a alguien. El problema es, en parte, que la ley de protección de datos que tenemos en la Unión Europea es muy estricta. De forma incongruente, se centra tanto en proteger a los usuarios que a veces protege a quienes no deben y dejan desamparados a los que sí lo necesitan.
La clave de la lucha del ciberacoso es la implicación de las redes sociales, son ellas quienes tienen el poder. Por eso necesitamos que estas redes faciliten una comunicación directa con las autoridades, para que así se pueda actuar con más agilidad ante los casos de ciberacoso, en lugar de toda la burocracia por la que se tiene que pasar en la mayoría de ellas.
Como padre de una niña, estoy muy concienciado sobre la importancia de formar e informar correctamente a nuestros hijos e hijas cuando crezcan y tengan móviles, ordenadores y tablets. Padres y madres debemos ser conscientes de dónde se meten nuestros hijos e hijas y a qué peligros pueden exponerse. Por eso también es importante que se den charlas a familiares del alumnado sobre este tema.
También quisiera añadir que hoy día una persona ciberacosada cuenta con mucha ayuda. Están los amigos, padres, familiares, teléfonos de ayuda, ONGs, cuerpos de seguridad del Estado, etc. A los padres que estén preocupados por sus hijos, decirles que servicios como el nuestro ayudan a entender mejor la tecnología, cómo proceder y cómo conservar las evidencias digitales de manera correcta para que tengan validez judicial.
Finalmente, recordar a los usuarios que compartir insultos o fotos íntimas de personas sin su consentimiento les hace partícipes de este ciberacoso, y también es delito. La línea entre una broma en la red social y el ciberacoso es muy delgada. La libertad de expresión no significa insultar ni humillar.