Pregunta para Eusko Legebiltzarra
La Alopecia es una enfermedad que afecta a muchísimas mujeres: ¿Cuándo darán visibilidad a esta afección para que se normalice dentro de nuestra sociedad y no sufrir tanto el proceso psicológico?
¡Hola! Mi nombre es Dora, vivo en el País Vasco y tengo Alopecia Areata Universal. La misma es una enfermedad autoinmune. La sociedad todavía no está preparada para ver mujeres calvas por la calle, por lo que nos sentimos señaladas y discriminadas.
Somos muchas mujeres las que sufrimos o hemos sufrido Alopecia. En la concepción de la sociedad actual ser mujer y no tener pelo parece algo inconcebible. Sin embargo, estudios recientes afirman que aproximadamente el 40% de las mujeres españolas padecen problemas con la pérdida del cabello. No obstante, a día de hoy, cualquier tipo de Alopecia Femenina sigue siendo un tema invisibilizado y tabú.
Todo comenzó hace tres años, cuando tuve que dar un cambio de 360° en mi vida. Mudanzas, asuntos laborales, cambio climático y muchas otras cosas me empezaron a agobiar. Un día en la peluquería me vieron una calvita y desde ese punto fue creciendo de más a más. Los tratamientos que hice no fueron efectivos ya que fueron solo para tratar el problema exterior, no tratan el origen de la caída del cabello, lo cual es muy importante para nosotras. Esto es algo que Sanidad no quiere ver: ¿Por qué no se hacen más pruebas y se trabaja al respecto? Y como si eso fuera poco, estaba buscando un bebé y quedé embarazada.
Durante el postparto se me cayó todo el pelo y en un mes y medio quedé calva total. Tenía la sensación de que me esteba desintegrando, que de a poco estaba desapareciendo. Sentía miedo, asco, odio a mí misma y no me podía ni mirar al espejo. El proceso fue durísimo y lo terminé de aceptar cuando mi hija, recién nacida, me tocó la cabeza y se reía. Sentí que me aceptaba y me quería tal cual era. No podía seguir así: Debía derrotar al monstro de la Alopecia y salir adelante. Quería dejar de esconderme de mi misma. Como dije, esto no sería nada sencillo ya que temía salir a la calle. No solo tenía que enfrentarme conmigo mismo, sino a una sociedad que me juzgaba continuamente.
La sociedad lamentablemente no está preparada para encontrarse a una mujer calva en la calle. Esto viene muy de atrás, junto con los estereotipos y las apariencias que, según el mandato patriarcal, el cabello es símbolo de feminidad. No es lo mismo un hombre calvo que una mujer calva. ¿Por qué? No hay conciencia, hay discriminación, muchas miradas y comentarios desafortunados. Es una realidad a las que nos afrontamos todas las mujeres con Alopecia y con cualquier otra enfermedad no-normalizada.
Hoy soy feliz. Acepté lo que me estaba sucediendo y que la Alopecia me iba a acompañar siempre. Era algo con lo que yo no iba a tener que luchar, sino convivir. Soy una persona como cualquier otra, voy por las calles sin peluca ni pañuelo porque para mí eso sería esconder una parte de mí. No siento que esté haciendo algo extraordinario: llevo mi vida normal.
Para todas las mujeres con Alopecia, les digo que vivan su proceso de pérdida del cabello, que fluyan con él. No pasa nada y es lógico estar triste o tener miedo, pero una vez que esa pasa esa fase que se quieran y se sonrían en el espejo. No pasa nada, tiren a la basura la peluca y mostremos al mundo lo guapísimas y maravillosas que son. No se dejen encarcelar ni aprisionar por la sociedad que te impone esconderte y taparte de ti misma.
Es por eso que os pido todo vuestro apoyo. Si llegamos a 500 firmas, las autoridades de la Comunidad Autónoma del País Vasco nos brindarán una respuesta en esta misma web para darle visibilidad a la Alopecia Femenina y lograr que algún día esta sea normalizada y libre de prejuicios. ¿Me ayudas firmando y compartiendo esta petición por todas vuestras redes sociales?