Pregunta para Parlamento de las Islas Baleares
Me llamo Elena y estoy superando un Linfoma de Hodgkin: ¿Por qué no se ofrece un acompañamiento nutricional para el refuerzo inmunológico durante el tiempo de enfermedad?
Me llamo Elena y vivo en Palma de Mallorca. A medianos de julio del año pasado, mientras trabajaba, mi pareja y una compañera se percataron de que tenía un bulto pequeño en el cuello. Decidí ir a visitarme con mi médico de cabecera. Allí me hicieron un análisis y me tranquilizaron porque me dijeron que esta afección podía ser cualquier cosa relacionada con una reacción de los ganglios frente una infección. Mientras esperaba los resultados de la prueba, que tardaron más de un mes y medio en darme, me salió otro bulto, diferente al primero. Este era más grande y se ubicaba encima de la clavícula. Volví al médico, me palparon y me dijeron que me llamarían al día siguiente, pero pasaron diez días y no me decían nada, así que llamé yo. Fue entonces cuando me anunciaron que el centro de salud dónde hasta ahora estaban llevando mi caso ya no era el sitio donde tenía que visitarme porque ya no vivía en el pueblo dónde se encuentra.
Busqué otro centro de salud en Palma de Mallorca y fue a partir de entonces que mi caso se empezó a mover un poco más; después de dos meses. El médico que me asignaron enseguida se interesó por mí y por mi caso, y después de la primera visita, todo fue muy rápido. Me mandó al hospital para que me viera el especialista. Allí me hicieron primero una punción y después una biopsia, y determinaron que tenía un Linfoma de Hodgkin, un tipo de cáncer que se origina en el tejido linfático, dónde se encuentran los ganglios linfáticos y los órganos relacionados que pertenecen al sistema inmunitario y al sistema productor de sangre del cuerpo.
En noviembre del año pasado empecé la quimioterapia. Me programaron seis ciclos, de los cuales me queda uno y medio por hacer; voy por la quimioterapia número nueve y me faltan tres. La primera sesión me sentó muy mal, fue mucho peor de lo que yo esperaba, pero gracias a la medicación suplementaria que me han ido ajustando a medida que ha ido avanzando el tratamiento, a partir de la segunda me he encontrado bastante bien. Durante todo el proceso de enfermedad que he pasado hasta ahora, lo único que me ha llevado problemas ha sido el 'Portacath' que me pusieron en diciembre, que me lo han tenido que quitar porque se ha infectado varias veces. Aun así, por lo que me comentan los médicos, el proceso de tratamiento está funcionado y todo indica que las cosas van bien.
Me he sentido muy acompañada con el equipo médico que me ha tratado desde el principio, pero he notado que he estado muy perdida con el tema de la nutrición. Me dedico a la gastronomía y sé la importancia que tiene la dieta durante cualquier proceso vital. En el caso concreto del cáncer, es necesario dar herramientas para reforzar el sistema inmunológico de manera natural cómo opción suplementaria a los tratamientos convencionales, ya que esto tiene que ver, también, con la oportunidad de que la persona haga alguna cosa para cuidarse de la enfermedad de manera proactiva. Es por eso que me dirijo a los políticos del Parlamento de las Islas Baleares, ya que son quienes me representan, para preguntarles, concretamente, ¿por qué no se ofrece un acompañamiento nutricional para el refuerzo inmunológico y psicológico a los enfermos de cáncer que están en tratamiento?