La naútica de recreo, se está convirtiendo en una actividad solo para ricos.

La regulación Española, consensuada con la patronal del sector ANEN, está expulsando a las clases medias y bajas del disfrute de un buen común, la mar.

España, es el único país de nuestro entorno, en el que existen la ITB, y el IEDMT, es además un país en el que siendo las costas de titularidad pública, y las marinas concesiones del estado a terceros, se sangra a los usuarios con precios de amarres difícilmente asumibles para la clase trabajadora. 

La normativa de seguridad para embarcaciones de recreo, es en algunos aspectos es equiparable a la de la marina mercante, existen dobles homologaciones con el material obligatorio (además de certificado CE, como en el resto de Europa, aquí debe estar aprobado por la DGMM, caso único en la UE)

Todo esto, ha convertido la mar, en un espacio solo accesible a clases altas o muy altas, cuando la mar, es de tod@s, también se ha producido una fuga de usuarios a pabellones extranjeros, debido a una regulación en otros países, mucho más avanzada, y orientada a la popularización de la naútica recreativa (Francia, Bélgica, Holanda, Alemania, Polonia...)

Sería deseable una regulación similar a países de nuestro entorno, para que la mar, vuelva a ser de tod@s, y no de un@s poc@s.