Desde hace tiempo, el PNV sigue una doble estrategia respecto a las políticas del Partido Popular.

Por un lado, en Euskadi critican esas políticas y se declaran en contra de ellas. Pero, por otro lado, las apoyan en el Congreso de los Diputados (aprobando los Presupuestos Generales del Estado, por ejemplo) o en el Parlamento Europeo sabiendo perfectamente que se aplican en Euskadi. Los ejemplos son numerosos: la LOMCE que se aplica en Euskadi de manera encubierta a través de Heziberri, tratados internacionales de libre comercio como el TTIP o el CETA que son perjudiciales para nuestra salud y nuestro tejido productivo, etc.

En el caso de las pensiones, si bien el PNV se declara en contra de la ridícula subida del 0,25%, pero mientras tanto está preparando el terreno para apoyar los Presupuestos Generales del Estado que validarán esa medida.

Como se preveía, el PNV apoyará los presupuestos a cambio de subir un poco las pensiones, del 0,25% al 1,6%, lejos de los 1080 euros mensuales que son considerados necesarios para llevar una vida digna.

En conclusión, el PNV está en una posición cómoda, ya que su apoyo es necesario en el Congreso de los Diputados, lo que le permite criticar en casa lo que aprueban en Madrid con subidas miserables.

Desgraciadamente, estas decisiones se toman en el Congreso de los Diputados, por lo que desde las Juntas Generales tan sólo se puede presionar políticamente para que el PNV no apoye, una vez más, las medidas antisociales del PP. Contactaremos con vosotros para debatir qué formula es mejor para introducir esta pregunta en Juntas.