Antes de hacer cualquier análisis sobre la tragedia de Zaldibar no hay que olvidar que los dos trabajadores, Joaquín y Alberto, siguen desaparecidos. Desde aquí mandarles un nuevo mensaje de apoyo a las familias y amigos y exigir que se refuerzen los medios de búsqueda. Más si cabe, una vez conocidas  las denuncias de las advertencias por parte del Gobierno sobre lo que decían en los medios. Mi más rotundo rechazo a los intentos de amedrantamiento por parte del Gobierno a unas familias que solo quieren encontrar a sus seres queridos y conocer la verdad de lo sucedido. 

Para continuar hay que negar que esto sea una catástrofe natural como en algún momento han afirmado dirigentes del Gobierno Vasco. Lo sucedido en Zaldibar, ahí están los datos, es fruto de una serie de negligencias por parte de la empresa Verter Recycling y por la ausencia de control efectivo por parte del Gobierno Vasco. Todo ello en el marco la gestión privada de los residuos generados en Euskadi, principalmente por la industria. 

Una gestión privada, y por tanto con ánimo de lucro, que con una legislación con muchas lagunas y controles deficientes complica aún más la gestión de los residuos. 

En cuanto a la gestión de la crisis de Zaldibar es palpable que deja mucho que desear. Hay que destacar la profesionalidad de las personas que trabajan en los distintos servicios de emergencia que a pesar de todas las dificultades actuaron. Pero no se puede tolerar la descoordinación entre OSALAN y el Departamento de Medio Ambiente que tardaron horas en advertir de la presencia de amianto en el vertedero poniendo en peligro a los profesionales de emergencia. 

Por otra parte la gestión de la crisis en cuanto a la información a la ciudadanía ha sido totalmente ineficiente y se evidencia cuando Urkullu pidió disculpas " por la ausencia de relato". Es totalmente irresponsable que lo que le preocupe al Gobierno sea el relato sobre una crisis y no la información rigurosa a la ciudadanía de la zona, que vivía con estupor y preocupación los cambios de versión que daba el Gobierno Vasco. 

Para finalizar, y poniendo énfasis en la búsqueda de las personas desaparecidas, es necesario que se depuren todas las responsabilidades tanto de la empresa como del Gobierno Vasco. Y que ,a corto plazo, abordemos como sociedad vasca el debate sobre la gestión de residuos tanto industriales como de cualquier tipo apostando por una producción y consumo sostenible y por una gestión pública de los residuos industriales ( dejando el mantra de "el que contamina paga" que en realidad es " el que puede pagar contamina") y  por los los Sistemas de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR)