Comparto vuestra inquietud porque en mi entorno hay también personas en situación de interinidad un problema agravado por los problemas perupouestarios que han sacudido a todas las administraciones durante la crisis.

Yo personalmente que en su momento saqué una oposición de secretario interventor municipal, se algo sobre concursos de ese tipo. Creo que esta pendiente una reflexión muy seria sobre el sistema de selección y reclutamiento de personal en las administraciones públicas. Creo que seguimos en este campo anclados en procedimientos bastante antiguos, exigiendo más conocimientos que competencias y en demasiadas ocasiones sin valorar adecuadamente las personas en el desempeno de las funciones que se le van a exigir. Hoy, por ejemplo cuando la evolución de los entornos de trabajo es acelerada, cuando se exijen a la administración prestaciones y servicios acordes en rapidez, accesibilidad y competencia a los que pides como cliente a cualquier organización privada, el perfil del empleado público tiene que asumir esa realidad y obliga a evolucionar conceptos como la monografía del puesto. 

 Creo que la mejor aportación que se puede hacer en este caso es, por supuesto, apoyaros en la defensa de los derechos que os correspondan en vuestra situación, pero, sobre todo, repensar el sistema de acceso a la Función Pública. Y creo que valorar a la persona en su puesto es una de las claves. La otra pregunta, clave, es cómo seleccionar a la gente para que llegue a las listas que te permiten  aunque sea en situación de interinidad, acceder a un puesto interino, demostrar que eres bueno haciendo lo que se te exige y capaz de adaptarte y evolucionar y convertir eso en mérito para adquirir una plaza fija.

Yo hablo mucho con gente que se dedica a la selección de personal y esas son las reflexiones que me hacen llegar.