Pregunta para Senado
Necesitamos una baja remunerada para las madres que sufran un aborto espontáneo y un protocolo unificado para que todos los hospitales ofrezcan la mejor atención en caso de duelo perinatal
Me llamo Jorge y soy matrona en un hospital, un trabajo que va mucho más allá de asistir en el parto. Son muchas las madres y familias que confían en nuestro colectivo para compartir cualquier inquietud o duda que puede surgir en el trascendental proceso del embarazo y el parto. Creo que no se habla lo suficiente de lo necesario y justo que sería que existiera una baja remunerada específica para los casos de pérdida gestacional espontánea, independientemente del momento en el que se produzca.
El duelo que tienen que pasar las personas que sufran una situación así no está contemplado en nuestra legislación actual y nada tiene que ver con el número de semanas de embarazo en el que se produzca el aborto. El sufrimiento puede ser igual si se trata de un aborto en las primeras semanas de gestación o de una interrupción del embarazo en un estado más avanzado. Detrás de cada embarazo hay una historia distinta, con madres y padres deseando iniciar un proyecto familiar en común.
Esta baja específica, que podría ser ampliable a la pareja de la gestante si la hubiera, es muy necesaria y evitaría que las madres que han pasado por esta situación tengan que reincoporarse a su trabajo tras una experiencia tan dura o que tengan que recurrir a una baja por ansiedad o depresión para poder sobreponerse y seguir adelante.
Lo que no se nombra no existe. Sin una baja específica para estos casos de duelo estaríamos invisibilizando y ocultando un problema real y es urgente que nuestros representantes políticos se comprometan a poner en marcha esta iniciativa. Sería un avance social que beneficiaría a toda la sociedad.
También es urgente que exista un protocolo unificado para los casos de duelo perinatal en todos nuestros hospitales. Algunos lo tienen, pero si no existe es muy difícil que todos los profesionales sanitarios estén preparados para ayudar a sobrellevar a las familias en estas situaciones.
Cosas como que las madres que han sufrido esto no tengan que compartir habitación, que se les retire la cuna, que tengan la posibilidad de despedirse de su bebé si quieren o que no tengan que escuchar frases como “eres muy joven podrás tener otro bebé pronto” pueden parecer detalles pero marcan la diferencia a la hora de afrontar un duelo de este tipo. Sin un protocolo claro dejamos todo en manos de la suerte de encontrar un profesional sanitario formado o con experiencia en estos casos.
Por todo esto quiero que esta petición llegue a todos los grupos políticos del Senado y el Congreso. Necesitamos que nuestros políticos hablen más de esto y se comprometan a reconocer esta realidad. Ayúdanos a hacerlo posible con tu firma y comparte para que le llegue a muchas personas.