En el municipio no existen normas reguladoras sobre la contaminación acústica y lumínica. En un municipio donde la vida es o debería ser tranquila (a todas horas hay cohetes), al menos yo me mudé por una calidad de vida no parece que hasta ahora al Ayuntamiento y sus gobernantes le haya importado. La salud y el bienestar deben ser potenciados con medidas de este tipo. Es necesario que se desarrolle la normativa de la Junta de Andalucía y se concience al vecindario de que todos deben respetar a todos, la libertad de una persona termina donde empieza la otra, el stress es la enfermedad del futuro y tenemos un municipio que puede colaborar a mantener la tranquilidad en nuestras casas y nuestras calles. Hace falta concienciación social y creo que su partido puede hacerlo.