Desde Podemos siempre apoyamos cualquier iniciativa que suponga mejorar el nivel de información que la ciudadanía recibe sobre los proyectos que las administraciones públicas quieren desarrollar.

En el caso de la incineradora, claramente estoy a favor de que se realice un debate público, y no sólo en EITB, siempre que ése se organice desde una perspectiva objetiva, primando la imparcialidad de los moderadores, la objetividad en la selección de los expertos y la independencia de los mismos en el debate.

Lo que es triste es que este tipo de debates no tengan cabida en un proceso participativo real, para que la ciudadnia se pueda posicionar claramente al respecto de la construcción de la incineradora, ya que su construcción y puesta en funcionamiento ya está decidida por parte de la Diputación.

Es más, el argumento de PNV y PSE de que las elecciones de 2015 ya supuso un debate y una decisión nos parece particularmente falaz. En las elecciones, los ciudadanos votan por una multiplicidad de factores, no sólo por uno. En estos momentos, PNV y PSE cuentan con 26 junteros a favor de la incineradora frente a los 23 en contra de Podemos y EHBildu. Esta diferencia tan escasa refleja bien la división que hay en la sociedad gipuzkoana al respecto y hacen que la necesidad de información y debate sea aún mayor.