Pregunta para Parlamento de Catalunya
El cribaje de cáncer de mama empieza alrededor de los 50 años. Casi una cuarta parte de nuevos casos se detectan en España antes de esta edad. ¿Por qué no se avanzan estas pruebas diagnósticas con el fin de garantizar la detección temprana?
Me llamo Lila, tengo 40 años y vivo en Catalunya. Hago deporte desde que tenía 18 años, tengo tres hijos y he llevado siempre una vida saludable. Yo acudía al ginecólogo privado de manera semestral para hacerme controles, ya que tengo pechos fibrosos. En febrero de este mismo año me hicieron controles y me indicaron que todo estaba bien. Después de cuatro meses, a finales de junio, tuve otro control y me indicaron que habían detectado una anomalía. Consideraron intervenirme quirúrgicamente y cuando lo hicieron los médicos se percataron de que había más afectación de la que se creía. Tenía cuatro ganglios linfáticos de un total de 14 afectados.
Después de unos días, con el objetivo de limpiar la afectación linfática, me operaron de nuevo. Entre la primera y la segunda operación, había pedido cita en la Seguridad Social para plantearme dónde seguir con el tratamiento del cáncer y cuando me llamaron para acudir ya me habían operado dos veces y me habían hecho todas las pruebas necesarias para empezar con los tratamientos. El trato que recibí en la Seguridad Social fue muy bueno, pero la demora entre plazos debería de revisarse. Además, considero que las instituciones deberían invertir a favor de que el servicio de salud pública pudiera practicar todas las pruebas diagnósticas necesarias a los pacientes. En estos momentos estoy lidiando con un tratamiento de quimioterapia del cual he hecho dos sesiones. También recibo tratamiento hormonal y después de esto me harán radioterapia y hormonoterapia.
Teniendo en cuenta mi caso, considero que, aparte de lo planteado, es importante incidir en que algunos cánceres crecen muy rápido y más si son hormonales y afectan a personas jóvenes. Los cribajes de cáncer de mama no se hacen hasta que las mujeres tienen alrededor de 50 años aunque una cuarta parte de cánceres de mama se diagnostican entre mujeres menores. Yo podría ser un ejemplo de persona a quien le daba miedo autoexplorarse; si no hubiera tenido mutua no me habrían detectado. Es por esto que me dirijo a los políticos del Parlament de Catalunya, ya que son quienes me representan, para que me respondan a la pregunta concreta: ¿Por qué no se avanzan las pruebas diagnósticas rutinarias con el fin de garantizar la detección temprana de la enfermedad?
También creo necesario trasladar que sería interesante que se destinaran más recursos económicos a la investigación de los beneficios del deporte y el cuidado de la nutrición sobre los efectos que generan los tratamientos de cáncer, por ejemplo, así como otros aspectos que podrían ayudar a conllevar mejor la situación.