Solo conduce a precarizar (más aún) al trabajador y al deterioro de calidad en el servicio
Estoy completamente en desacuerdo con los procesos de privatización de los servicios públicos esenciales, como es el de Correos. La experiencia con otras privatizaciones (totales, como Telefónica o Endesa) o parciales (como AENA o la gestión de Hospitales públicos) han demostrado que ni los trabajadores y ni los usuarios salen beneficiados. Al final, estos procesos sólo benefician a los grupos de inversores (y a sus siervos que ejecutan las privatizaciones desde la política) pero terminan provocando un deterioro de las condiciones laborales, el consiguiente efecto sobre la calidad del servicio y un aumento paulatino de los precios del servicio.
El caso de Correos me toca especialmente de cerca, pues conozco a traves de familiares muy cercanos el devenir de la empresa en los últimos años. Mi suegro, funcionario jubilado recientemente tras más de 35 años de servicio ha visto cómo su oficina se iba vaciando de personal cualificado y con experiencia, del cuerpo de funcionarios del estado, por personal contratado por 3 meses, 2 meses, o incluso uno o semanas. Esto implica que cada vez que entra alguien nuevo, los veteranos deben dividir su tiempo entre sus tareas y formar a los nuevos en las suyas (o en muchos casos, terminar realizándolas el, directamente). El proceso de deterioro de las condiciones en correos es algo que viene de lejos. Como suelen hacer, dejan de aportar recursos para luego decir que "no funciona bien" y que la "única solución" es privatizar.
Paralelamente, mi cuñado entró hace poco en Correos como personal laboral. Le contratan por unos meses, luego está otros tantos sin trabajar, luego (supuestamente) le vuelven a llamar. Es una especie de falso fijo discontínuo. Estando en uno de esos periodos de carencia, le llamaron para ir a trabajar un sábado de refuerzo, paralizando el derecho a prestación por desempleo, y ayudando a engrosar las cifras de nuevas contrataciones que tanto enorgullecen a la Ministra Fátima Báñez, por un contrato de UN DÍA. Es un desastre que desde empresas públicas se esté fomentando la precariedad laboral de este modo, al amparo de las nefastas reformas laborales de PSOE y Partido Popular.
Por todo esto, desde Podemos apoyamos firmemente las reivindicaciones de la Plataforma de Eventuales de Correos, y os tendemos nuestra mano para llevar a cabo iniciativas desde nuestros escaños en las instituciones que sirvan para erradicar estas prácticas abusivas con el trabajador y revertir el proceso de privatización.
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¿Quiénes somos la Plataforma de eventuales de Correos?
La Plataforma de Eventuales de Correos (PEC) surge con la intención de que Correos consolide el empleo eventual, reconociendo al fin los años de prestación de servicios de miles de trabajadoras/es. Exigimos la regulación de la contratación bajo unos criterios democráticos donde la antigüedad y la transparencia sean los elementos principales. No es sostenible subsistir trabajando una media de seis meses al año, viendo como, además, a través de la figura de idóneos, la empresa practica el enchufismo. Tras haber destruido más de 15.000 puestos de trabajo desde que se iniciase la crisis, Correos S.A. continua a marchas forzadas la degradación de las condiciones laborales de la plantilla.
Nuestra forma de organización es asamblearia, puede participar cualquier trabajador de Correos independientemente de su afiliación sindical (o no afiliación), su puesto base, etc.
La actualidad en Correos:
Entre los días 24 de octubre y 3 de noviembre quedaron abiertas las bolsas de empleo temporal de Correos S.A. una vez alcanzado un acuerdo entre la dirección de la empresa y los sindicatos que han participado en la negociación (CCOO, UGT, CSIF y Sindicato Libre) a través de la Comisión Central de Empleo.
Las medidas más perjudiciales son:
1)El no reconocimiento de la antigüedad total del tiempo trabajado en la empresa y su bajo porcetanje de puntuación en relación, por ejemplo, a los cursos o los méritos académicos. La configuración de méritos puede dejar a mucha gente en la calle. El personal veterano será el más afectado y, en concreto, las mujeres eventuales. Parece claro que el perfil de mujer mayor de 45 años es del que Correos S.A. quiere desprenderse. ¿Qué expectativas laborales puede tener una persona que orbite los 50 años?
2)La posibilidad de decaimiento de las bolsas por evaluaciones negativas y falta de disponibilidad.
3)La implantación estructural de jornada parcial (en sus diversas modalidades) en detrimento de la jornada completa. También este apartado parece que golpeará más a las mujeres eventuales. Basta con mirar los datos del trabajo parcial para observar que las mujeres con este tipo de trabajos son muchas más que sus compañeros varones (un 72% del total). La cuestión del patriarcado y el trabajo doméstico hace que sea la mujer quien acabe cediendo ante la jornada parcial.
4)La elavada puntuación de una serie de cursos que sólo pueden realizar los eventuales en activo a través de la empresa o cursarse (previo pago) con algunos sindicatos.
5)Serán los Servicios Médicos de Correos los que, a la vista del certificado aportado por el aspirante, determinen el cumplimiento del requisito de aptitud psicofísica, y en su caso, podrán realizar con carácter previo los reconocimientos y pruebas que estimen oportunos. Estos reconocimientos y pruebas serán obligatorios.
6)La falta de transparencia y control por parte de la plantilla de las nuevas bolsas -como sucede con las vigentes en la actualidad-.
La PEC llevará a cabo todo tipo de acciones, legales, movilizadoras, institucionales, etc, siempre de forma colectiva, porque de lo que no se participa es difícil sentirse parte integrante. Y eso es lo que necesitamos, que la mayoría de la plantilla (y no solo eventual) se incorpore a la lucha por nuestros derechos, por la defensa de un Correos público y de calidad, donde la fijeza y la mejora de nuestras condiciones laborales permitan recuperar un Correos para todas y todos.