Pregunta para Parlamento de Galicia
Se ha normalizado la ansiedad provocada por el sistema educativo. ¿Por qué no se ofrecen herramientas para saber gestionar la presión que nos provocan los exámenes como Selectividad?
Los exámenes de Acceso a la Universidad provocan a muchos alumnos y alumnas grandes situaciones de estrés y ansiedad. Desde pequeños nos presionan para que sigamos un camino en el que parece que si no eres el mejor no vales para nada. La nota que sacamos en un examen lo es todo para determinar que grado universitario estudiaremos y, por tanto, cuál será nuestro futuro. Creo que se ha normalizado la ansiedad provocada por el sistema educativo sin que nadie tome medidas ni se hable de ello. Yo me pregunto, ¿por qué no se ofrecen herramientas para saber gestionar la presión que nos provocan los exámenes como Selectividad?
Personalmente siempre he sido exigente con mis resultados académicos, pero la presión que me hizo sentir este último curso acabó con mi estabilidad emocional. Lloraba todos los días porque no sabía gestionarla, tenía las expectativas muy altas y la Selectividad me daba pánico.
Tras valorarlo un tiempo, hablé con mis padres porque pensé que necesitaba ir al psicólogo y enseguida buscamos cita en la Seguridad Social ya que, como la mayoría de la población, no podemos permitirnos pagar uno privado. La cita la pedimos en noviembre, pero no nos daban hora hasta mayo. Esto fue terrible para mí ya que estaba en época de exámenes y sentía mucha presión.
Para mi alivio un día me llamaron porque encontraron un hueco para ir en diciembre. La primera sesión fue bastante bien, pero me dieron la siguiente cita para febrero. Era difícil mejorar teniendo una sesión de 20 minutos cada dos meses. Por eso creo que es necesario ampliar las plantillas de psicólogos en la sanidad pública y aumentar los presupuestos para ofrecer una atención de calidad. Para mí fue imposible mejorar o al menos notar un cambio significativo en mi estado de ánimo ya que no conté con las herramientas para hacerlo.
Al acabar el curso me dijeron que me iban a dar el alta, aunque yo no pensé que estuviera preparada. Dejé de ir al psicólogo en mayo y en junio tenía la Selectividad, así que lo peor solo estaba por venir. No entiendo por qué no se ofrecen charlas sobre salud mental en los colegios e institutos, creo que de ser así muchos de estos problemas podríamos aprender a gestionarlos nosotros mismos.
La visión del profesorado tampoco ayuda demasiado. En primaria muchos nos metían miedo sobre el instituto, decían que si no nos esforzábamos no llegaríamos. Después vino el miedo por Selectividad. Somos conscientes de que son exámenes importantes, pero no todo puede definirlo eso, no somos máquinas y podemos tener días malos. A muchos la presión nos sobre pasa en momentos de estrés y no es justo que esto pueda arruinarte la carrera. He visto a gente con matrícula de honor en bachillerato que por los nervios y la presión de Selectividad no han logrado sacar la nota que esperaban y se han quedado fuera del grado que habían solicitado.
El sistema educativo actual te dice que vales la nota que saques en un examen. Parece que tienes que llegar a cierto nivel para poder ser alguien en la vida. Incluso nos dicen que si no cursas un grado universitario y decides meterte en un módulo de formación profesional eres inferior.
Sería mucho pedir que el sistema educativo cambiara de un día para otro, pero creo que sería necesario proporcionar herramientas sobre educación emocional para que los niños y niñas sepan aprender a gestionar esa presión.
Yo conseguí sacar la nota que necesitaba y al final el esfuerzo "valió la pena" pero para ello tuve que sacrificar mi salud mental y no creo que eso deba ser así. Nadie debería tener que sacrificar su salud mental por nada y menos aun cuando la ayuda psicológica es un privilegio y no está al alcance de todos.
Me parece increíble que aún con los alarmantes datos que existen sobre la salud mental de los jóvenes en el instituto no se ofrezca ni una sola charla de concienciación. La policía viene a explicarnos las normas de tráfico cuando todavía no sabemos conducir, pero nadie habla sobre salud mental, educación emocional o prevención del suicidio.
Por todo esto quiero dirigirme al Parlamento de Galicia para reivindicar la importancia de la salud mental y pedir que se tomen medidas desde los colegios e institutos para abordar la emocionalidad de los más jóvenes.