La perdida de población de Bilbao es una consecuencia más de su pérdida de influiencia y liderazgo. Necesitamos ganar atractivos, que generen oportunidades de inversión, sobre todo, en el ámbito de las empresas tecnologicas y del conocimiento. Ser capaces de retener el talento que crea nuestra universidad. Bilbao tiene que estar entre las grandes ciuades, tiene que ser capital tecnolótica, y esas oportunidades revertirán sin duda en que cada vez haya más gente con ganas de estar y vivir en Bilbao