Pregunta para Asamblea de Madrid
Tengo un hijo de 10 años con TDAH y los precios de las terapias y la falta de comprensión son insostenibles a veces. ¿Cuándo le van a dar a estos trastornos la visibilidad que requieren y otorgarles ayudas a las familias para poder tratarlos cuanto antes?
Me llamo Mapi, resido en Madrid y mi hijo David, de 10 años, tiene TDAH. Desde siempre ha sido un niño bastante inquieto; trepaba, tiraba todo al suelo, desobedecía las órdenes que le imponíamos… tuve que dedicarme a su cuidado.
Empecé a notar que era muy activo. Muy impulsivo, y cuando a los 2 años y medio lo llevé a la guardería, me decían más de lo mismo, que no se estaba quieto, que no respetaba los turnos de los demás… el primer paso fue ir al pediatra y comentarle la situación, pero éste me dijo que era demasiado pequeño como para diagnosticarle de hiperactividad. Cuando empezó la etapa de primaria, la cosa nu mejoraba, su agenda seguía llegando llena a casa de notas de sus profesores; recuerdo que una profesora nos comentó que algo le pasaba al niño, que no controlara esa impulsividad significaba algo. Sacaba muy buenas notas, peor tenía problemas con los compañeros. Hablando con ella, decidí acudir al neurólogo; este observó al niño y pronto nos comentó que tenía sospechas de TDAH; nos hizo rellenar unos informes y darle otros a la maestra, sospechando que podría ser algo neurológico. Entre tanto, el niño acudía al psicólogo y de todo; fue un alivio porque al menos podíamos ponerle nombre a lo que le pasaba. Todo indicaba a un posible TDAH, y finalmente, lo diagnosticaron de TDAH combinado.
Nadie lo veía, pero como padres, lo teníamos claro. El diagnóstico llegó a los 6 años, y ya con 7, psicólogos y otros expertos que lo trataban, veían que no mejoraba, por tanto y aunque fue complicado, decidieron otorgarle medicación temporal. Lo más complicado fue la falta de comprensión, hay que decirle muchas veces las cosas para que las haga y esto provoca continuas discusiones, lo cual repercute en un continuo mal humor. Las terapias han ido funcionando pero muy lentamente. La gestión emocional es también muy compleja, su energía es agotadora y tiene tics, además de actuar constantemente sin pensar. Como todo esto era tremendamente caro, y tras cambiar la medicación en varias ocasiones sin acertar, fuimos por lo privado; aquí nos dieron una evaluación completa, pero hablamos de una cantidad muy elevada de dinero.
Necesitamos ayudas para poder costear todo esto; además, un diagnóstico temprano es fundamental para estos niños, cuanto antes se detecte, con anterioridad se puede comenzar a trabajar con ellos y esto es fundamental para su desarrollo. Ojalá tuvieran el reconocimiento que merecen porque, con la llegada de la adolescencia, esto solo empeora. Finalizar comentando que podéis obtener más información sobre todo esto en mi blog https://mentestdah.blogspot.com/?m=1.