Somos Marián y Patricia y vivimos juntas en Málaga. Las dos ejercemos la profesión de docentes, tanto a nivel de Infantil y Primaria como enseñanzas adultas (Universidad…). Nos hemos dado cuenta de que en la educación parece que la diversidad familiar y la orientación afectivo sexual todavía es un tema poco visible y poco normalizado. ¿Cuándo se va a incluir la diversidad familiar como un elemento curricular en la enseñanza de los primeros años?

En los primeros años, tan importantes de desarrollo del niño/a, uno los recursos más utilizados son los cuentos, y aunque cada vez son más los cuentos infantiles e historias que introducen una realidad diferente a la familia tradicional, formada por dos personas heterosexuales con hijos/as, estos no llegan a las aulas o lo hacen de una manera muy puntual, de manera testimonial. Desde pequeños se podría introducir la diversidad afectivo sexual y la diversidad familiar en los cuentos y actividades que se realizan en las escuelas para visibilizarlo y normalizarlo. 

¿Por qué el día de la Familia no engloba tanto el Día del Padre como el Día de la Madre? Una de las actividades menos inclusivas que existen hoy en día es la celebración del día de la madre o el día del padre. Hay niños y niñas que tienen dos papás o tienen dos mamás, o no tienen padre, o no tienen madre, o viven con los abuelos y abuelas, etc… y se quedan descolgados en la celebración de unos de estos días, tan presentes en la Comunidad Educativa. En ese día todos los niños y niñas preparan obsequios para sus padres o sus madres en los que bien los dibujan, le escriben cartas…y quienes no tienen ese referente se le sustituye esta actividad por otra tarea, que normalmente consiste en dibujar a su familia. ¿Por qué entonces el día de la familia no sustituye el día del padre y el día de la madre al englobarlos?

Es contradictorio educar en diversidad familiar cuando desde las instituciones educativa no prevalece la idea de familia.

Es fundamental educar en diversidad familiar desde la etapa de Educación Infantil, que es cuando se conocen los niños y niñas y empiezan a sociabilizar entre ellos y entender los diferentes contextos en los que viven. Hay que naturalizarlo y visibilizarlo porque es algo que si no trabajamos bien les va a estar acompañando durante toda su etapa educativa.

Creemos que es necesario naturalizarlo en las distintas asignaturas de forma transversal, y que no se quede como un contenido puntual, sino que esté presente a lo largo de toda la etapa educativa. 

¿Es necesario que los centros educativos sean espacios seguros donde los estudiantes puedan expresar libremente su orientación sexual? Los centros educativos no siempre son espacios seguros para que el alumnado pueda expresar libremente su orientación sexual, ya que en muchos casos son objetos de bullying por sus propios compañeros/as. De hecho, el bullying homofóbico, así como la falta de respaldo familiar y escolar, hace que los niños/as y jóvenes del colectivo LGTBIQ tienen más riesgo de suicidarse, siendo una de las principales causas de muerte entre este grupo poblacional. La educación afectivo-sexual debe estar presente en la etapa educativo, hasta conseguir naturalizar las distintas tendencias afectivas y sexuales para proteger a los jóvenes y que no se sientan miedo de comunicar sus sentimientos, fomentando entornos educativos seguros, donde se sientan apoyados/as y libres de ser quienes quieran ser.

Cada vez son más las familias diversas que reivindican que quieren que en los centros educativos a los que van sus hijos e hijas se trabajen todos estos temas, siendo voces críticas con el fin de eliminar la discriminación familiar y sexual, fomentando la tolerancia y el respeto. Por esto pedimos al Congreso de los Diputados que se incluya la diversidad familiar como un elemento curricular transversal en la enseñanza desde los primeros años, así como la diversidad sexual en la etapa correspondiente de maduración del alumno/a.