¡Hola! Mi nombre es Miriam Aguilar, visibilizo la no maternidad por circunstancias y acompaño mujeres en los círculos de mujeres sin hijos. 

Hace falta que se conozca que existen personas que han querido tener hijos y por una enorme gama de circunstancias no lo han sido. Es una elección que suele ser mal vista como “rendirse o abandonar”, pero esto lo único que hace es estigmatizar a las personas que deciden, de manera muy dolorosa, no continuar con el proceso de ser madres.

Intenté ser madre durante ocho años. Los primeros siete, tuve cuatro embarazos que acabaron en aborto dentro del primer trimestre de gestación, es decir en las primeras semanas. En estos siete años pasaron muchas cosas, fue un camino muy largo en el cual me sentí muy sola y viví pensando que solo me pasaba a mi, que era la única que no podía ser madre.

El último año, al ver que de forma natural no se daba y fruto del miedo y la presión social, entre otras cosas hicimos un tratamiento de reproducción asistida que no funcionó. Así que a los 41 años decidí parar. Todo esto que me había pasado necesitaba contarlo de alguna manera y al hacerlo recibí un montón de feedback de mujeres que se sentían muy identificadas.

Sentía que la gente no entendía que pasar por algo así implica mucho dolor e implica un duelo. Y las mismas no te dejan hacer el duelo, ni salir de él. Todavía existe la creencia que una mujer no es feliz ni se siente completa sin ser madre. Que las parejas tienen que tener hijos, que esa es su finalidad, que sin hijos no eres feliz ni alcanzas cierto nivel de madurez. La presión social existe porque la he vivido y a todas las mujeres que acompaño también les ha pasado.  

En base a todo esto: mi experiencia vivida y mi desarrollo personal es que realizamos los círculos orientados a mujeres que han querido tener hijos, aunque mujeres que no son madres por elección también se sienten identificadas con lo que comparto en mi redes.

Me dirijo principalmente a mujeres que han querido ser madres y por la razón que fuere no han podido acceder a la maternidad, ya sea por infertilidad, causas socioeconómicas o por alguna enfermedad incompatible con el embarazo. En fin, son muchísimos los motivos y siempre se centra en la infertilidad. De esta manera se está dejando afuera a un montón de personas, dentro de la minoría ya existente.  

A nivel individual o de parejas, hay una enorme falta de acompañamiento emocional. Se ha puesto el foco en la reproducción asistida, la cual es un negocio multimillonario, y se han olvidado de la parte emocional. Es realmente necesario, parece como si no se entendiera que esas cosas duelen y realmente se necesita algún tipo de apoyo. La mayoría de las personas están pagando un psicólogo o terapeuta por vía privada.

No es negativo o malo ponerse limites si uno los necesita. No todas las personas que quieren tener hijos los pueden tener. Hay personas que les es físicamente imposible, pero eso no puede ni debe invalidar el deseo anterior de ser padres. Muchas personas dicen que, si quieres ser madre o padre lo vas a lograr, pero no siempre es así. No está mal ponerse límites para seguir otro camino de vida y poder también ser feliz.

Es por eso que os pido todo vuestro apoyo para visibilizar e informar sobre la #NoMaternidadPorCircunstancias. ¿Nos ayudas firmando y difundiendo esta campaña por todas vuestras redes sociales? ¡Muchas gracias!