Pregunta para Parlamento de Catalunya
¿Cuándo los médicos van a tratar adecuadamente a los pacientes? No toda la población tiene el mismo conocimiento médico pero sí el derecho a ser correctamente informado
Me llamo Montse, resido en un pueblo de Barcelona y he tenido varias y muy diversas experiencias con médicos.
Hace 7 años aproximadamente, fui al ginecólogo, me hicieron unas pruebas del útero y me dijeron que tenía varios miomas ¿qué era eso? Me pregunté, tuve que pedírselo a la doctora para entenderlo mejor, y me tranquilizara, llegué a pensar que sería algún tipo de cáncer, recuerdo asustarme bastante. Tras pedir las explicaciones necesarias a mis dudas, ya me dijeron que era algo benigno, no obstante eché en falta otro tipo de trato y de explicaciones al dar un diagnóstico cómo paciente ya que, sino hubiera preguntado, me hubiera quedado con miedos y otra película en mi cabeza. El médico es una persona experta en el tema del que te está tratando, pero los demás no somos expertos, de entrada pienso que podría haber empleado otros términos o haberme explicado más detenidamente qué era lo que tenía. Por otro lado, hace un par de años, tuve un aborto espontáneo, y a la siguiente revisión con el especialista en miomas, me estaba realizando una ecografía, y resultó muy violento cuando me dejo ir “no sé dónde vas quedandote embarazada con este útero!”, me quedé helada, la Infermera que lo acompañaba también, no atiné a responderle, de lo mal que me sentí, pero a mi ginecologa de referéncia se lo expliqué y le pedí que a partir de ese momento no quería que ese doctor me visitara más. Y hasta el momento así me lo han respetado, y siempre pido que sea otro profesional quién me realize las ecografias uterinas para el seguimiento de miomas. Ya suficiente tenia en eso momento de asumir mi aborto que no hacía ni una semana, cómo para recibir ese respuesta de un profesional, no le encuentro excusa, ni que el hombre hubiera tenido un mal dia.
Y lo más actualizado, hace poco tiempo, inicié un proceso de rehabilitación tras caerme y lesionarme el hombro; me derivó en una tendinitis del supraespinoso y una capsulitis de la escápula izquierda, todo el mundo a mi alrededor me decía que la recuperación de algo así llevaba su tiempo. Fui al traumatólogo por la mutua, me hicieron una resonancia y vieron que tenía un edema óseo; me mandó ir al fisioterapeuta. Realicé muchas sesiones del mismo, y cuando iba a terminar las 40 que me incluía mi seguro, me dijeron que debía tomar una decisión más drástica: operarme; la operación consistía en limarme la clavícula para que dejara más espacio al tendón inflamado. Así que me dió cita con el cirujano, para realizar otra valoración sobre la propuesta operatoria, éste me dijo que el no veía ninguna necesidad de operarme, que era un tiempo largo de recuperación, però que con la rehabilitación necesaria podria volver a tener mobilidad, y disminución del dolor.
Igualmente, acudí a la seguridad social para obtener una segunda opinión; y el fisioterapeuta me explicó lo mismo que el proceso de rehabilitación era más lento, con más sesiones de rehabilitación y refuerzo muscular de la zona, podía tener oportunidad de darle al cuerpo el tiempo necesario de recuperación. Estas son algunas de las experiencias con médicos que he tenido, pero podría contar otras, dónde también he sentido apoyo, y empatía en los 10 minutos que tienen el personal médico para atendernos.
Tengo constancia que cada vez, hay más profesionales que se dan cuenta de esta necesidad de tener cura en el acompañamiento emocional del paciente, y empiezan a formarse en disciplinas cómo programación neurolingüística, educación emocional, cómo transmitir malas notícias en circumstáncias excepcionales. Necesitamos que el personal especializado en cada tema informe a los pacientes correctamente de lo que tienen, no todos tenemos los mismos conocimientos en medicina y salimos desorientados, no me puedo imaginar ya si se trata de algún tipo de enfermedad más grave como un cáncer. Que los pacientes y sus familiares reciban un buen trato y la información pertinente sobre aquello que padecen, es fundamental y un derecho de todas las personas.