Me llamo Natalia y he superado un cáncer de mama.

Hace dos veranos, a los 41 años, me encontré un bulto en el pecho. Como mi pareja era médico de familia me lo palpó, pero me aseguró que se trataba de un fibroadenoma. A mí me resultó extraño, pues yo ya había tenido fibroadenomas y este me parecía diferente.

Pasaron diez meses y noté que el bulto había crecido. Me hicieron una ecografía y, tras ver los resultados, me solicitaron una biopsia. Finalmente me diagnosticaron un cáncer de mama hormonal.

A continuación, para combatir la enfermedad, me practicaron una tumorectomía y comprobaron que los ganglios estaban limpios. Una vez recuperada de la intervención me administraron 16 ciclos de quimioterapia y 25 de radioterapia. Ahora estoy siguiendo el tratamiento hormonal de los cinco años, y a punto de terminar con el Trastuzumab.

Aunque tuve días en los que me encontraba muy mal, llevé todo el proceso relativamente bien, gracias a mantenerme activa y seguir practicando deporte. En cambio, considero que los pacientes oncológicos deberíamos recibir algún tipo de ayuda económica  para afrontar los enormes gastos que tenemos que asumir y que no están cubiertos por la Seguridad Social, como los derivados de las pelucas, cremas, pañuelos o alimentación, entre otros.

Por ello, con esta iniciativa pido al Parlament de les Illes Balears que destine más recursos a la investigación del cáncer y a las ayudas económicas a los pacientes oncológicos, con el objetivo de que puedan pasar por este proceso de la mejor manera posible.