Me llamo Olga, soy de Guadalajara y soy superviviente de dos trastornos de la conducta alimentaria (TCA).

Durante cinco años sufrí trastorno por atracón y bulimia. En ese tiempo pude comprobar que falta concienciación en las escuelas, apoyo para que los familiares sepan cómo ayudar y especialistas de la salud pública que traten a las personas con trastornos alimenticios. 

Profesionalmente, me dedicaba a las redes sociales y a crear contenido para empresas, hasta que decidí orientarme hacia la nutrición, algo que siempre me ha llamado la atención y motivo por el cual estoy especializándome en ello. 

Debido a mi experiencia personal, mi idea es ser nutricionista especializada en TCA, ya que hay poca gente que se dedique específicamente a ello. Mientras tanto yhasta que termine mi formación, me dedico a concienciar e informar sobre estos trastornos a través de mi canal en YouTube y mi perfil en Instagram. 

Considero que hablar sobre estas enfermedades es algo imprescindible y necesario. En mi caso, la enfermedad apareció a los 18 años, y no ha sido hasta los 26 cuando puedo decir que estoy totalmente recuperada. No obstante, hay muchas personas que siguen pasando por esta enfermedad cada día y necesitan un trabajo y apoyo constantes para salir de ahí.

Pensamos que los TCA están relacionados con dejar de comer o querer verse delgada. Sin embargo, la mayoría de los casos están estrechamente ligados con una mala relación con la comida. En este sentido, sería interesante que los centros educativos formasen e informasen sobre este tema. Que las niñas y niños conozcan cómo deben cuidarse de forma sana y adecuada, reforzando a la vez su autoestima.

Del mismo modo, considero un factor clave “educar” y concienciar a los padres y madres en este aspecto ya que no suelen saber como afrontar estas enfermedades. Debemos dar apoyo a las familias para que estas sepan cómo hablar y actuar con sus hijos e hijas. 

Pero no todo es prevenir. Hay casos en los que eso ya no vale o es demasiado tarde. Y es precisamente en esos casos donde hace falta una atención mucho más cuidada y especializada. Las personas con TCA necesitan más apoyo, específico y asequible, y sobre todo apoyo de psicólogos especializados en estos trastornos. Un psicólogo especializado en otras patologías la mayoría de las veces no es lo adecuado.

Por ello, me gustaría destacar la necesidad de incluir también mejoras a nivel sanitario, empleando a psicólogos especializados en trastornos por TCA.

Por todo lo anteriormente expuesto, me dirijo a los miembros de las Cortes de Castilla-La Mancha para que tengan en cuenta este problema y tomen medidas al respecto.