La intervención de lo público en cuestiones vitales de nuestras vidas son su objetivo.
Evidentemente no. El principio de cooperación regulatoria prevé iguales condiciones para ambas realidades (USA y UE). Y si atendemos a la historia y otros acuerdos como el NAFTA veremos que la armonización regulatoria siempre juega a favor de las transnacionales cogiendo como comunes los estándares más bajos y de menos capacidad de lo público para corregir o equilibrar los efectos de la economía. Los servicios públicos (sanidad, educación, servicios sociales, etc...) están amenazados de muerte aún más que con este tratado con otro como el TISA.
Compartir
¿Es posible mantener servicios públicos cuando se pretende crear (CETA, TiSA y TTIP) un mercado común de servicios con países donde están fuertemente privatizados (p. ej. la sanidad en Estados Unidos)?