Hola, soy Pere Vidal y soy abogado y profesor en la Universitat Oberta de Catalunya. La mayor problemática que hay actualmente en el sector es que los abogados junior y recién graduados que quieren empezar a ejercer en la abogacía, se encuentran con ofertas laborales completamente precarias, abusivas e incluso ilegales.  En muchas ofertas te invitan a ser autónomo, con una retribución fija y a tiempo completo con dedicación exclusiva, pero lo que realmente están anunciando un falso autónomo abiertamente, encubriendo una relación laboral con un salario muy por debajo del mínimo del convenio de aplicación.

Pero el hecho de que las condiciones de muchas ofertas sean tan precarias no impide que mucha gente que se suscriba, al contrario. Las empresas (en su mayoría despachos de abogados) juegan con la ventaja de que hay muchos abogados, muchos graduados en Derecho con ganas de ejercer y que, de primeras, incluso ellos no se dan cuenta del abuso que son esas ofertas de trabajo. Pero los candidatos no tienen la culpa, ellos se suscriben a ofertas porque realmente están necesitados de empleo.

El problema que yo encuentro es que este tipo de ofertas se publican en portales online como Infojobs, LinkedIn o incluso en los colegios de abogados. No realizan ni si quiera un mínimo control previo de legalidad de lo que están publicitando, más allá de las ofertas abiertamente discriminatorias. Porque una cosa es que una oferta laboral sea ilegal o precaria de una forma encubierta y no esté en manos del portal poder gestionarlo, pero otra bien distinta es publicitar claramente una oferta ilegal. 

Están facilitando que este tipo de puestos se publiquen y tengan candidatos, con el añadido de que algunos de estos portales (por ejemplo, InfoJobs) cobran a las empresas por publicar sus ofertas. Es decir, están obteniendo un rédito económico por publicar ofertas de trabajo ilegales.

Este tipo de prácticas no se denuncian. Los estudiantes y recién graduados se quejan, cuentan sus experiencias en distintos foros… Pero nunca se atreven a denunciar ante Inspección de Trabajo (y mucho menos llevarlo a la Jurisdicción Social). Y esto es por el miedo a después no encontrar trabajo en el sector legal. Pero no es así, las denuncias son confidenciales y los despachos entre ellos tampoco hablan tanto entre ellos. Pero por más que se trata de explicar a los jóvenes que denuncien este tipo de abusos y que están sujetos a confidencialidad, no se atreven.

Ver un anuncio en el sector legal que directamente está publicitando un puesto ilegal (falso autónomo), con un salario mensual de 600€ y requiriendo experiencia previa es inadmisible. Por ello quiero dirigirme al Parlamento de Catalunya, porque es necesario que por parte de las instituciones pongan el foco en los distintos portales de empleo y en los propios colegios de abogados. Incluso que el hecho de publicar abiertamente ofertas laborales ilegales – motivado por una absoluta falta de control por parte del portal de empleo - sea sancionable no solo para el que lo oferta, si no también para el que da difusión a estas prácticas ilegales.