Soy Rafael Moya, abuelo de Cloe, una niña de 2 años y medio de edad a la que no veo desde el 16 de abril, cuando los servicios sociales de Valencia se la llevaron a un centro de acogida.

Nosotros somos de Quart de Poblet (Valencia), desde que Cloe nació me he hecho cargo de ella debido a que su madre tenía problemas de adicción y su padre estaba en prisión; junto con mi hermana nos encargamos de darle techo, comida, ropa y una red familiar cariñosa. 

En abril de 2021 fui a los servicios sociales de Valencia para pedir la custodia de mi nieta porque contaba con una familia y economía estable, sin embargo, decidieron quitarme a la niña alegando que estaba en desamparo.

A pesar de habernos dado informes positivos para poder seguir cuidando a la niña fuimos amenazados con una denuncia de secuestro por las trabajadoras sociales, por esto, decidimos entregar a Cloe con la esperanza de recuperarla pronto.

Desde ese momento me han dejado ver a la niña sólo dos veces en un Punto de Encuentro, donde Cloe se encontraba en malas condiciones, con ropa sucia, sin seguridad por Covid y, además, con pañales sucios.

Soy consciente que las familias y los centros de acogidas ayudan a muchos niños y niñas que se encuentran en situaciones de riesgo, sin embargo, Cloe y muchos otros niños tienen familias que los quieren y desean cuidarlos y protegerlos.

Han pasado ya cuatro meses desde que no veo a mi nieta y quisiera saber si está bien, si necesita algo y ver la forma de que regrese con nuestra familia, nos hace mucha falta y tiene a una familia y pueblo entero que espera su regreso.

Por eso, pido a los políticos y las cortes valencianas, ya que yo soy residente de Valencia, que atiendan mi caso y que me ayuden a recuperar a mi nieta, Cloe. Somos una familia de bien y con una red estable de cuidados, por lo que no hay base para considerar desamparo legal.

Sólo necesitamos recolectar 500 firmas para que mi caso llegue a las cortes valencianes y los políticos puedan contestarme en este mismo sitio web, únete a mi causa firmando y compartiéndola para que sea un precedente y sigamos luchando por el regreso de muchos niños y niñas con su familia.