Pregunta para Parlamento de Catalunya
Tras notarme un bulto en el pecho, dos ginecólogos diferentes me aseguraron que no se trataba de nada grave. ¿Cuándo se van a destinar más recursos a la investigación del cáncer y a su detección temprana?
Me llamo Silvia y he sobrevivido a un cáncer de mama triple negativo.
En septiembre de 2015, cuando tenía 34 años, me noté un pequeño bulto en el pecho. Aunque de entrada no le di importancia, decidí visitar al ginecólogo que me revisaba una vez al año, por privado, dos semanas más tarde. Ya en consulta, tras explorarme, me dijo que no parecía nada grave, pero que solicitase una mamografía si así me iba a quedar más tranquila. En mi opinión, esto fue un gran error por su parte, pues al tener antecedentes de cáncer en mi familia, considero que debería haberme derivado directamente al hospital.
Pasado un mes visité a mi médico de cabecera para que me programase esta prueba. En cambio, me dijo que era yo la que debía pedir cita en ginecología, ya que a pesar de que ambos servicios perteneciesen a la Seguridad Social, él no me podía derivar directamente. De nuevo, este me aseguró que mi bulto no parecía ser maligno, y que con realizarme una ecografía sería más que suficiente.
El mismo día en que me hicieron esta prueba, ya en febrero, solicitaron de inmediato una mamografía y una biopsia, lo que me hizo sospechar de que algo no iba bien. A los tres días me llamaron y me dijeron que debía acudir al hospital.
Finalmente, el diagnóstico no fue bueno: padecía un cáncer de mama triple negativo en estadio 3, que me comunicaron, además, de una manera muy fría. A continuación, me dijeron que el protocolo a seguir para combatir la enfermedad consistiría en una tumorectomía, quimioterapia y radioterapia.
Durante este proceso, de casualidad, di con el oncólogo que había tratado el cáncer de ovario que se llevó a mi madre, y decidió someterme a la prueba genética. Di positivo en el gen BRCA1, lo que significaba que mi cáncer era genético, y no tendría que someterme a la radioterapia. En cambio, me ofrecieron realizarme la mastectomía e histerectomía preventivas, que por supuesto acepté.
A día de hoy estoy en lista de espera para que me arreglen las prótesis, pues desde el principio me han dado muchos problemas, y padezco insomnio a raíz de la extirpación de ovarios. Además, tengo dos hijas que tendrán que someterse a la prueba genética cuando sean mayores de edad, por lo que creo que todavía queda mucho para cerrar este episodio.
Por último, quiero destacar la falta de respaldo laboral que sufrimos los pacientes oncológicos, pues a raíz de mi enfermedad me quedé en la calle, sin derecho a paro y con muchas dificultades para encontrar un nuevo trabajo.
Por ello, con esta iniciativa pido al Parlament de Catalunya que destine más recursos a la investigación del cáncer, a la mejora de los protocolos para su diagnóstico precoz y al respaldo económico y laboral de los pacientes que atraviesan esta enfermedad.