Asumimos que esta cuestión ha sido filtrada en la agenda política aunque no vemos que sea una de las mayores urgencias ni prioridades en nuestro país. Abordar la situación actual de los procesos de adopción, buscar justicia y reparación para los bebés robados y sus familias biológicas  son cuestiones tanto o más urgentes, y así lo llevamos en nuestro programa. 
Puestas a responder a esta demanda de una parte de la sociedad, pensamos que no puede resolverse en dos tardes ni mucho menos al margen de la sociedad civil. Y en esto es fundamental tener en cuenta a las personas implicadas, por todas las partes, sin duda, pero también a los movimientos feministas, porque si se trata de ser garantistas, lo primero es garantizar los derechos de la madre gestante y la capacidad de decidir libremente sobre su cuerpo.