Me llamo Sonia. Me dedico a la docencia y a la investigación en Matemáticas a partes iguales. Soy profesora titular en el Departamento de Física y Matemáticas de la Universidad de Alcalá.

He sido la primera mujer en obtener el premio Ciencia de la Universidad de Pekín y mi objetivo es dar un poco de luz a las mujeres científicas, darnos visibilidad para hacer que se nos pongan las cosas un poco más fáciles y tener más apoyo dentro de nuestro sector.

De pequeña no imaginaba llegar a ser científica. Aspiraba a ser peluquera, maestra, abogada… Yo provengo de la una educación clásica en la que te casas y tienes hijos por lo que he sido puntera y he roto barreras, incluso, en mi propia familia.

Descubrí las matemáticas de la mano de dos grandes profesores que me hicieron ver que en lugar de ser horribles son una ciencia interesantísima, maravillosa, fascinante, y con la que empecé a sentirme útil al ver que de alguna manera podía ayudar a hacer la vida más fácil. 

Pero he tenido muchas dificultades por el hecho de ser mujer, más de las que esperaba. A las mujeres nos cuesta llegar a ser Catedráticas o Titulares cuando tenemos una familia detrás. Por ejemplo, no puedes dejar a tus hijos e irte a hacer una estancia de un año en Pekín, como ha sido mi caso.

Es lo de siempre. A final somos pocas las mujeres las que elegimos carreras científicas y esto hace que las cúpulas y la representación del sector sea principalmente masculina. La sociedad está llena de catedráticos, de hecho, en mi departamento no hay ninguna mujer que lo sea.

Las mujeres tenemos un papel muy importante. Hemos demostrado que cuando se nos da la oportunidad de participar en investigaciones tenemos muy buenos resultados, somos punteras, lideramos con energía y pasión. Por ello, me gustaría que hubiese más mujeres como yo para dar visibilidad a la importancia de nuestro papel en la ciencia. 

En este sentido, es necesario hacer ver a los niños y niñas que la mujer puede llegar ahí. Hay iniciativas como el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia, pero debería haber muchas más porque no son suficientes. Se necesita más ayuda, más impulso y más actividades como esta.

Es fundamental incentivar la ciencia en los colegios desde la pasión, porque las matemáticas son mucho más que para poder ir a la compra y que no te tomen el pelo. Tenemos que hacer que las matemáticas y la ciencia sean visibles para que a los niños y niñas les explote la curiosidad por entrar en este mundo fascinante.

Hay varios cambios necesarios para promover la igualdad de género en las carreras científicas. Por ejemplo, a la hora de ser catedrática tienes que cumplir una serie de méritos en los últimos 10 años y, si has tenido un hijo fácilmente tienes un año en blanco. 

Si tuviera que priorizar, el primer cambio lo centraría en la conciliación. Hay que poner medios para hacer que las mujeres puedan compatibilizar su carrera con la familia y, tener la oportunidad de ascender. 

Por otro lado, está el tema de las evaluaciones en investigación. Tengo compañeros con un currículum parecido al mío, que han tenido hijos y acaban de ser catedráticos y, sin embargo, yo no he podido acceder a la cátedra por ese año en blanco en el que todo lo compatibilicé con la maternidad.

Al final te frustras y, cuando trabajas tanto y pides una cátedra y te dicen que no porque hubo un año en el que no estuviste en ningún proyecto tienes ganas de rendirte y decidir qué lejas de luchar. Estamos perdiendo talentos que, de hecho, deciden irse fuera, por la frustración que produce no tener frutos después de tantos años de esfuerzo

Al final necesitas ver el fruto de tanto esfuerzo y este premio ha sido justo lo que necesitaba. Aunque me han reconocido el trabajo de 10 años desde Pekín, no desde España, me aporta fuerzas para poder seguir y alcanzar lo que quiero porque creo que soy buena investigadora y haré un buen papel cuando llegue a ser catedrática.

Por ello inicio esta campaña de firmas, con el objetivo de entablar diálogo con políticos de Congreso de Diputados para reclamar la importancia y la necesidad de dar visibilidad a las mujeres en la ciencia desde los colegios hasta las universidades.