Hola, soy Tania Benito y soy coach de carrera profesional. En mi día a día trabajo junto a personas con las que su salud mental se ha visto afectada directamente por los riesgos psicosociales vividos en sus anteriores empresas. Algo que les influye negativamente a la hora de buscar nuevas oportunidades laborales.

Hoy en día en las empresas cada vez hay más carga de trabajo, más presión y, en muchas ocasiones, la capacidad de liderazgo de los directivos es susceptible de mejora. Todo ello termina afectando a la salud de los trabajadores. Por ello, las evaluaciones de riesgos psicosociales en el terreno laboral son completamente necesarias y, por ley, deben cumplirse. Pero según un informe del año 2012 de OSALAN, en la Comunidad Autónoma Vasca solamente el 5,01% de los centros estudiados ha realizado la evaluación de riesgos psicosociales. Por tanto, el resto obvian este requisito legal y no lo llevan a cabo.

Los riesgos psicosociales están presentes en el día a día de muchas empresas. Cargas de trabajo excesivas, un entorno de trabajo negativo, desmotivación, malestar emocional e incluso acoso, cosa que me tocó vivir en primera persona. Todo esto puede llevar al trabajador a tener graves problemas de salud física y emocional que derivan en bajas laborales que producen un gran gasto a la Seguridad Social.

Al igual que se previenen los riesgos laborales hay que prevenir los riesgos psicosociales, pero a estos, al ser más complejos de evaluar, no se les da la importancia que merecen. Esto solo sucede cuando las empresas ven directamente el problema (mucho absentismo, fuga de talento, dificultar para atraerlo… o incluso cuando tienen algún conflicto interno entre empleados) se dan cuenta del mal estado de sus trabajadores. Y, en muchos casos, esperan a que así se lo indique un inspector de trabajo o, lamentablemente, hasta no recibir una sanción.

En nuestro entorno estamos rodeados de gente afectada, gente con grandes ataques de ansiedad, depresiones, inseguridades creadas por sus jefes o compañeros y que su salud mental se ve negativamente afectada. Por ello quiero dirigirme a los miembros del Parlamento Vasco para que se anticipen a esos riesgos, para que inviertan ayudas en campañas de apoyo a nivel económico para las empresas y que así realicen esas evaluaciones psicosociales. 

De esta manera, las empresas se volverán más competitivas porque sus trabajadores estarán más motivados y serán más productivos. Se mejorará la calidad del empleo y será más sencillo que las empresas atraigan talento y lo retengan, Y, a su vez, se generarán nuevos puestos de trabajo para técnicos en PRL y consultores en riesgos psicosociales. Porque los riesgos psicosociales también se pueden prevenir.