Soy Yaiza y he pasado por la odisea de recibir durante años diferentes tratamientos contra la un cáncer llamado linfoma.  
 

Cuando el médico te informa de que el cáncer por fin ha remitido, piensas que ese es el final del camino. Pero es solo el principio de otra nueva aventura en el que te encuentras con unos estudios para un trabajo que ya no puedes realizar, con años en blanco en tu currículum y con pocas posibilidades de que te contraten en cualquier empresa los empresarios piensan que eres una persona propensa a enfermar, coger bajas y ausentarte en el trabajo.  
 

¿Qué pasa con los pacientes una vez que se curan y les dan el alta? No tenemos ningún tipo de asesoramiento para reinserción laboral y social como sí que tienen otros colectivos vulnerables de la sociedad.  
 

Actualmente yo no puedo trabajar a jornada completa, tengo muchas secuelas después de haber pasado años recibiendo tratamientos agresivos. Las personas que tenemos secuelas derivadas del cáncer que hemos superado necesitamos que se nos asesore y que se nos apoye en la búsqueda de empleo para que podamos volver a ser productivos para la sociedad. Pero también que las empresas den facilidades para las personas con estas secuelas: reducción de jornada, habilitación del puesto de trabajo, etc.  
 

Necesitamos poder trabajar, dentro de nuestras posibilidades. Que se nos tenga en cuenta,que se nos reconozca como un colectivo vulnerable al que brindarle la ayuda que necesita.  
 

Por todo ello, exigimos un plan estatal de reinserción laboral donde se nos tenga en cuenta. Necesitamos orientación laboral y social para que nuestra transición a la vida laboral sea adecuada.