El Ayuntamiento de Zizur ha decidido instalar 68 cámaras de vigilancia en la localidad, de las cuales 3 son radares fijos y uno móvi. Alegan que el motivo principal ha sido la demanda de los ciudadnos que , según ellos, desde la pandemia exigen más seguridad. Las 65 cámaras se colocarán con la colaboración de la policía en 30 ubicaciones elegidas “estratégicamente” por ser puntos que definen como conflictivos.

No sólo es mentira que haya una gran demanda ciudadana detrás de esta decisión, sino que las cámaras dan una falsa sensación de seguridad cuando lo único que consiguen es coaccionar la libertad de las personas que vivimos en Zizur. Militarizar una zona da de todo menos seguridad. 

La demanda ciudadana no es algo a definir unilateralmente, ni por intuición. No ha habido un estudio previo ni una consulta. Para un consenso real se debería resolver esto mediante la participación ciudadana, como se ha hecho en otras ocasiones en Zizur para definir los intereses sociales.

Andoni Serrano, el Concejal de Seguridad Ciudadana, asegura que Zizur es un municipio tan seguro como el resto de municipios de Pamplona, pero sus actos demuestran lo contrario. Es por eso que exigimos la paralización de la medida y una ordenanza que garantice que este tipo de decisiones se tomen a través de consulta popular.