Somos la Agrupación Semillas del Lirquén de Rucalhue, parte del movimiento “Rucalhue sin represas”, que nació de la lucha de un grupo de jóvenes locales contra la instalación de la cuarta central hidroeléctrica en la Región del Bío Bío.

Inicialmente nos agrupamos por la necesidad de exponer problemáticas medioambientales en la comuna de Quilaco, ya que tenemos el problema de vivir en un pueblo rodeado de Pinos, de hecho, no podemos ingresar a la orilla del Río Bío Bío porque privados nos negaron la única entrada. Tampoco podemos acercarnos a la orilla del río ni practicar pesca, debido a las crecidas repentinas producto de las otras centrales (Pangue, Ralco y Angostura), lo que ha sido fatal para personas que han ido a pescar.

Como jóvenes nos dimos cuenta de que existen muchos problemas medioambientales que había que exponer, en un principio nos juntamos un grupo de amigos y decidimos tomar acciones al respecto. Esperamos que las autoridades tomen acciones pertinentes y que finalmente se involucren con lo que sucede en nuestro alrededor, ya que no queremos que se construya una cuarta central en el Río Bío Bío, consideramos que el daño que ya tiene es nefasto, y otro muro de cemento va a terminar de destruir parte de nuestra vida.

Es triste darse cuenta de que van a desaparecer muchos lugares, vamos a privar a futuras generaciones de verlo. Acá nos están quitando el derecho fundamental de vivir en un entorno libre de contaminación, de hecho, hemos tenido que acudir a otros lugares para saber lo lindo que es vivir en armonía con el medio ambiente.

Si siguen instalándose centrales hidroeléctricas en nuestra región, Rucalhue de aquí en un periodo de 20 años más será un pueblo desplazado porque no habrá agua y no existirá un lugar en el cual podemos decir que vamos a vivir. Esto afecta no solamente a la localidad, también a comunidades indígenas que habitan en la zona, a nuestro turismo, a nuestro entorno que nos permitiría tener un buen vivir.

También es importante recalcar que nuestra región está siendo mutilada por parques eólicos, centrales hidroeléctricas, empresas forestales y parece a nadie importarle. Por ejemplo, el Río Lirquén ha sufrido la usurpación de monocultivos y agroindustrias de privados que hoy lo tienen al borde de la sequía.

Falta información y educación en la población, pero sobre todo falta que se deje de criminalizar acciones necesarias para que las denuncias medioambientales se conozcan. Nosotros como movimiento protestamos a inicios de año en el terreno donde se pretende utilizar para la construcción de la cuarta central hidroeléctrica, logrando una paralización de obras por casi seis meses, demostrando de este modo la unidad territorial en contra del proyecto. Además, gracias a esto logramos que finalmente la Municipalidad de Santa Bárbara y la Municipalidad de Quilaco tomara una postura en contra de este proyecto y se levantará una mesa de trabajo con la organización Defensa Ambiental.

Consideramos como agrupación que se debe declarar emergencia climática en la región de Bío Bío, además de una mayor fiscalización por parte de las autoridades a las centrales hidroeléctricas. Debemos buscar soluciones que busquen el buen vivir para todes. Necesitamos todos los apoyos posibles, ya que si conseguimos las firmas suficientes está petición llegará a las autoridades y nos tendrán que dar una respuesta en esta misma web. Sé parte de la petición haciendo “clic” en apoyar y ayúdanos a difundir.