Hola, mi nombre es Ángel y tengo 25 años, como dicen soy un psicólogo recién salido del horno. En Extremadura hice la carrera y el máster en Jaén. Durante la pandemia fue cuando empecé a ejercer como psicólogo. Junto a mis compañeros hicimos un voluntariado y apoyo psicológico a la comunidad universitaria en Jaén. Ahí comienza mi recorrido. Nos pusimos a prueba iniciando el camino de la psicología a través de esta iniciativa. Y fue donde veo que esta profesión era para mí, me gustaba muchísimo acompañar a las personas en buscar la solución a sus problemas. Tras terminar el máster empecé a moverme de forma individual en busca de un trabajo, mientras tanto, pasaba consulta a gente cercana y con el boca a boca me iba funcionando. Y al final he conseguido tras mucho moverme un trabajo en Cáritas como psicólogo. 

(Durante mi formación en el máster, mis compañeros y yo, junto a la universidad,) Creamos un servicio de apoyo psicológico durante todo el día. Desde las 8 de la mañana hasta las 22 de la noche. Éramos un grupo entre 15 a 20 psicólogos aproximadamente y nos íbamos turnando de lunes a domingo donde todas las peticiones y consultas se iban atendiendo. La ayuda fue variando según las demandas de las personas. Al principio se trataba de ansiedad por confinamiento al estar encerrados, para aprender cómo gestionar las emociones y pensamientos. Muchas eran personas que necesitaban ese apoyo de antes, por las problemáticas que habían vivido. En la pandemia la cabeza funcionaba más porque estabas tú conmigo mismo por lo que cuanto más pasaba el tiempo, esta situación les sobrepasó. Atendíamos estudiantes, profesores y familiares. Ya era un colectivo amplio y que podíamos dar así una atención de calidad.

Me parece super triste y me da mucha lástima, ya no solo por los psicólogos que trabajan, sino por el valor que se le da a la salud mental, de cómo está el sector y el trato a los pacientes. Visto la situación con la que hemos estado de pandemia, sigo sin entender que no se haga nada. En España, por cada 100.000 habitantes hay 6 psicólogos. Cuando en otras partes de Europa nos triplican o cuadruplican el número de psicólogos. Mucha gente prepara el PIR o intentan el máster general sanitario, pero al final son muy difíciles de acceder. En el PIR hay pocas plazas y necesitas mucha nota, además de la cantidad de gente que se presenta. En el máster es que hay mucha gente que quiere acceder y hay pocas plazas, pero es un poco más accesible. De ahí cuando consigues el máster, pones todas tus manos para poder trabajar.

Creo que principalmente hay que buscar la unión de todos los psicólogos. No podemos seguir mirando por nosotros solo, hay que mirar por el colectivo para que se nos escuche. Si desde de arriba no nos valoran, por mucho que hagamos es cierto que es complicado. Pero si entre todos nos unimos podemos conseguirlo. Sin salud mental no vas a ningún lado, la pandemia es una evidencia que tenemos a nuestro favor. Tendrían que haber más plazas en el PIR y en el Máster. Para marcar un camino. Que una consulta psicológica o psiquiátrica te tenga que ver cada 4-6 o 8 meses… No hay una continuidad. La propia consulta en sí son 15 minutos, no te da tiempo ni a conocer bien qué es lo que pasa. Si aparecen pensamientos suicidas que es de las cosas más graves que puede suceder, y tienes que esperar una lista de espera de 4 meses… Lo siento, pero es que el esperar, a muchas personas las conduce a llevar a cabo el suicidio en el que pensaban.  Por eso es importante abrir el acceso a las plazas y al máster. Queremos trabajar y ayudarles. 

En amigos y compañeros sigo viendo ese estigma negativo de ir al psicólogo. Que alimenta que la gente no quiera ir. El psicólogo es necesario. Cuando tienes dolor de espalda y vas al fisio vas encantado, porque te ayuda. En cambio, cuando tienes un problema que te afecta a nivel de salud mental la gente no lo ve igual. Estás cuidando tu salud al mismo nivel, con diferentes métodos, pero te está cuidando. No tengas miedo al psicólogo, somos dos personas iguales que conversan en la búsqueda de una solución para ti, solo que una de esas personas tiene el conocimiento y las herramientas para ayudarte y la persona afectada tiene la experiencia y el conocimiento para poder mostrar su vida. El psicólogo va a estar de tu mano, dándote apoyo y ayuda. Hay que romper con este estigma. Ayuda en la salud emocional. Incluso se puede ir al psicólogo sin estar mal, para mejorar algo de ti, para sentirte mejor. No estás mal, pero quieres mejorar.

“Es que yo cuando me cabreo tengo que soltarlo todo por la boca” eso me decían algunos compañeros, y claro yo le explicaba que hay otras formas. Que es normal que lo haga así porque lo ha aprendido así. Así llegamos a la conclusión que si de pequeños nos ayudarán a controlar emociones y a gestionarlas tendríamos mucho terreno ganado.  Por eso me gustaría preguntarle a las instituciones, en concreto al Parlamento de Andalucía, sin la salud mental no podemos hacer nada, ¿hasta cuándo se va a dejar a los profesionales sin apenas plazas para los másteres y el PIR? Por eso firma esta iniciativa para que por fin los psicólogos seamos escuchados. BASTA DE QUE LA SALUD MENTAL ESTÉ A LA COLA DE EUROPA.