Somos la Asociación Científica de Matronas de Castilla-La Mancha.

Las matronas estamos en un punto crítico en España. En la actualidad hay una falta considerable de matronas. El relevo generacional está en riesgo debido a la jubilación de muchas de nosotras y a que las escuelas de matronas permanecieron cerradas desde 1987 hasta 1994 que coincide con la jubilación de muchas de ellas.

Además, la media europea de matronas por cada 100 mil mujeres es de 69,8, mientras que en España estamos en 31,6 matronas por cada 100 mil mujeres. En Castilla-La Mancha estamos en la media española. En cuanto a nacimientos, en la Unión Europea la media es de 25,9 matronas por cada mil nacimientos y en España estamos en 12,4 matronas por cada mil nacimientos.

Debido al movimiento a nivel nacional que ha provocado esta falta de matronas, nació la idea de reactivar la Asociación de Matronas de Castilla-La Mancha (suspendió temporalmente su actividad en 2019). Estamos intentando promover la figura de la matrona para que la sociedad y los políticos conozcan la importancia de nuestro trabajo y la falta de profesionales que hay.

Socialmente se cree que nos dedicamos únicamente al seguimiento del embarazo y la asistencia del parto, pero dentro de nuestras competencias también se encuentran los cuidados al recién nacido durante los primeros 28 días de vida, el apoyo a la lactancia materna, educación sexual y reproductiva, desarrollamos la campaña de prevención de cáncer de cérvix, promoción y prevención de la salud vulvovaginal, asesoramiento en planificación familiar procreativa y anticonceptiva y acompañamos a las mujeres durante el climaterio.

Estamos cualificadas para realizar todos estos cuidados, pero es imposible desarrollarlos porque el ratio de matronas por población es bajísimo. La administración opta por recluirnos en paritorios para la asistencia al parto y en centros de salud solo da tiempo a dedicarnos prácticamente al embarazo. El resto de competencias muchas veces las asumen otros profesionales como los médicos de atención primaria o enfermeras, lo que empobrece la calidad asistencial a las mujeres.

Necesitamos más matronas por cada mujer tanto en nuestra comunidad como a nivel nacional. Deberíamos ocupar los puestos en las plantas de hospitalización obstétrico-ginecológica, en las consultas de atención especializada de obstetricia y ginecología y aumentar la ratio en los centros de salud.

No solo hace falta aumentar el número de plazas en los puestos que nos corresponden, sino que también necesitamos formar más matronas. Actualmente la vía de acceso para llegar a ser matrona es cursar el Grado en Enfermería de cuatro años, hacer el examen EIR, y cursar 2 años más como enfermero interno residente.

La administración de cada comunidad autónoma decide, en base a la dotación presupuestaria, cuantas matronas se forman cada año en cada hospital, siendo siempre inferior el número de matronas en formación que el total de plazas acreditadas que existen.

Tenemos formación especializada para ser profesionales autónomos e independientes, con un sistema de acceso y nivel responsabilidad reconocido con la categoría A1 a nivel europeo, pero en España se nos sigue considerando A2. En Castilla-La Mancha no se nos está retribuyendo a nivel económico acorde a lo que merecemos. Estamos cobrando como cualquier enfermera generalista sin ningún tipo de especialización, mientras que en otras comunidades autónomas las matronas sí que están cobrando complementos salariales.

También queremos destacar que, en nuestra comunidad, las matronas de atención primaria no forman parte del equipo de atención primaria, lo que significa que somos personal de apoyo. Esto quiere decir que no tenemos asignado un cupo de pacientes como pueden tener los médicos de atención primaria, sino que llevamos a muchísima más población. Necesitamos que esa figura se reforme y pasemos a formar parte del equipo de atención primaria para mejorar la ratio, desarrollar todas nuestras competencias y ofrecer cuidados de excelencia a todas las mujeres.

Desde la asociación queremos que las matronas de Castilla-La Mancha nos empoderemos y creemos conciencia de colectivo para luchar con más fuerza a la hora de mejorar tanto nuestras condiciones laborales como retributivas.

Nos gustaría poder abrir un espacio para que todas las matronas de Castilla-La Mancha puedan decir en qué condiciones trabajan en cada gerencia, poder plantear mejoras para conseguir una mejor asistencia, desarrollar todas nuestras competencias y aumentar nuestro nivel retributivo.

Tenemos como objetivo principal ser las interlocutoras entre nuestro colectivo y los agentes de salud, en este caso con el consejero de salud de Castilla-La Mancha, directores gerentes de los hospitales, sindicatos, asociaciones de mujeres, asociaciones feministas, etc., para así poder mejorar tanto la asistencia que damos a las castellano-manchegas como nuestras condiciones laborales.

Es importante también defendernos contra el intrusismo laboral que muchas veces sufrimos, puesto que hay muchas de nuestras competencias que asumen otros profesionales de la salud, sin ser los más apropiados para llevarlas a cabo.

¡Necesitamos más matronas, todas juntas somos más fuertes!