Pregunta para Asamblea de Madrid
Convivimos con la neurodiversidad en nuestro día a día y necesitamos atención especializada. ¿Cómo puede haber una lista de espera de más de un año y medio para el neurólogo?

Cuando nos convertimos en padres, soñamos con hijos sanos, sin dificultades, pero nunca pensamos en las complicaciones que puedan surgir. Cuando nos dijeron que Vera tendría dificultades, no comprendíamos la magnitud de lo que nos esperaba. Poco a poco, nos dimos cuenta de que la dificultad sería para toda la vida.
Lo que más pedimos como padres es que la sociedad trate a nuestros hijos con neurodiversidad como a cualquier otro niño. Necesitan atención especializada, un tratamiento multidisciplinar desde el principio: fisioterapia, logopedia, estimulación, psicomotricidad, integración sensorial... Pero la realidad es que encontrar estos recursos es muy difícil, y las listas de espera son largas.
Además, las familias debemos navegar por procedimientos burocráticos que complican aún más el proceso. La espera para ver a especialistas se convierte en una carga, y en el sistema sanitario no hay referencias claras, ni una especialidad que abarque todas las disciplinas necesarias. Esto se extiende a la educación, donde aunque se habla de inclusión, la realidad es que muchas veces los colegios no cuentan con los recursos ni el personal capacitado para ofrecer un verdadero proceso inclusivo.
Los padres de niños con neurodiversidad nos enfrentamos a una lucha diaria para que nuestros hijos reciban el trato y los recursos que necesitan. Pero lo que no comprenden las autoridades es que, si se invierte en la atención temprana y en los recursos adecuados, no solo se mejora la calidad de vida de nuestros hijos, sino que se reduce su dependencia a largo plazo.
Dar oportunidades es dar calidad de vida. La neurodiversidad no es una dificultad; es simplemente una forma diferente de funcionar. Lo que necesitamos es que los entornos se adapten a nuestras familias, no que nuestros hijos se adapten a ellos. Necesitamos una sociedad más inclusiva, más accesible, que vea a nuestros hijos por lo que son: personas con derechos, con una vida plena por delante.