LAS MODAS PASAN, LA POLITICA Y SUS PRINCIPIOS Y OBJETIVOS PERMANECEN
Hola Xigor,
yo creo que UPyD nunca ha estado muy de moda. Nunca hemos recibido el trato obsequioso y favorable que los grandes grupos de comunicación han dedicado primero a Podemos, y luego a Ciudadanos. Sería interesante tener los datos de las horas de TV y radio, así como de páginas de periódico, que se han dedicado a UPyD desde que aparecimos en 2007, y el que han recibido esos partidos.
¿"Errores de comunicación"?
A la espera de que alguien tenga interés en investigarlo (es todo un tema de tesis doctoral sobre la relación entre medios de comunicación y política), adelanto que no hay comparación posible, ni cuantitativa ni cualitativa.
A nosotros nos han ignorado todo lo que han podido, y normalmente el tratamiento informativo ha ido más a resaltar problemas internos que a hablar de nuestro trabajo político. Por ejemplo, ¿cuánta gente sabe que la primera propuesta de Ley de Segunda Oportunidad la presentó UPyD en 2011 en el Congreso de los Diputados? Sí, esa ley para acabar con los desahucios injustos que ahora todos dicen querer presentar cuatro años después. Pues la presenté yo mismo en marzo de 2012. Luego me han llamado muchos periodistas para que les explicara en qué consiste la Segunda Oportunidad, pero curiosamente a ningún medio le pareció necesario hacerme una entrevista, salvo al digital Idealista.com
En fin, ¿cuánta gente sabe que UPyD ha sido la primera en presentar también en el Congreso el fin de los aforamientos, la independencia del poder judicial para acabar con el reparto politizado del CGPJ, o en introducir el debate contra la corrupción que negaban todos ellos? ¿Cuántos saben que gracias a UPyD y sus 26 querellas por el saqueo de las Cajas, haciendo el papel de una fiscalía al servicio de los saqueadores, muchos accionistas, preferentistas y empleados de las Cajas podrán recuperar su dinero y derechos? ¿Cuántos saben que Gorka Maneiro ha defendido hasta la saciedad el fin de los privilegios fiscales vascos en el propio Parlamento Vasco? ¿Cuántos que los concejales y parlamentarios de Madrid de UPyD renunciaron voluntariamente a coches oficiales, privilegios de distintos tipo e incluso que los delegados-vecinos han devuelto voluntariamente 240.000 € para comedores sociales de sueldos que consideramos demasiado elevados (pese a que varios están en paro)?
Y podría seguir así muchas páginas. Naturalmente, pocos saben qué ha hecho UPyD porque los encargados de informar a la opinión pùblica no han querido hacerlo. Y si bien hemos podido y sabido sustituir a la fiscalía en Bankia o la estafa de las preferentes, no hemos logrado -ni creo que sea posible- sustituir a docenas de periódicos, televisiones o radios que no hablan de UPyD o hablan mal el 75% de las veces. Nos han hecho luz de gas sistemática, excepto cuando había problemas que, por otra parte, ocurren en cualquier partido político.
El trato discriminatorio de los grandes grupos de comunicación, a veces incluso hostil traspasando todas las líneas rojas de la deontología profesional, demuestra que no solo nunca hemos estado de moda, sino que molestábamos y seguimos molestando. Nos hemos ganado muchos enemigos con nuestra actividad, un resultado previsible que algunos llaman "error de comunicación", pero es otra cosa: las consecuencias de una política consciente. Nuestro principal "error de comunicación" ha sido no tener dinero para usarlo en publicidad, reportajes y compra de portadas y espacios, prácticas muy usuales en la política española. Hemos preferido invertir el poco que tenemos en construir un partido, invertir en justicia y hacer pequeñas campañas electorales. Sí, parece que así no se consigue estar de moda...
Medios, dinero y política
Tampoco estaría mal documentar la financiación privada que hemos tenido unos y otros, y que debería ser pública si tuviéramos, y no es el caso, una buena Ley de Transparencia.
En 2008 financiamos el 100% de nuestra primera campaña electoral con donativos y micropréstamos, pero entonces tampoco estaba de moda el crowfunding y nadie elogió como una nueva forma de hacer política, siéndola, la única respuesta posible al cerrojo financiero de los bancos. Mucha gente no lo sabe aún, pero en España son los bancos y sus préstamos los que deciden quién hace campaña electoral y quién no. La igualdad de oportunidades de acción política es una quimera en estas condiciones (y algo que UPyD quiere cambiar para todos los partidos nuevos, no solo para nosotros). No lo había contado hasta ahora, pero el recientemente fallecido Emilio Botín se extrañó en una reunión de financieros de que UPyD hubiera conseguido entrar en el Congreso de los Diputados en 2008 cuando habían quedado en que nadie nos prestaba un euro. Me lo contó una persona de confianza presente que oyó el comentario del gran banquero.
Es cierto que otros bancos sí nos prestaron dinero después de 2008 (sobre todo el Popular y BBVA), como también que nos consideraban muy buenos clientes porque devolvíamos siempre el préstamo en forma, cantidad y plazo. Pero sensibles a los malos pronósticos electorales que nombras como "no estar de moda", han vuelto a cerrarnos el grifo. Y hemos vuelto a pedir ayuda a los ciudadanos para que UPyD pueda hacer una mínima campaña electoral -las nuestras son siempre austeras- para que se pueda votar a nuestros candidaturas, y vamos a conseguirlo una vez más. No estaremos de moda, pero contamos con el apoyo y comprensión de muchos ciudadanos.
Naturalmente, espero que los bancos nos restituyan el crédito cuando pase este bache. Pero no deja de ser significativo que los bancos, y muchos han ampliado su negocio a costa del dinero público del rescate a las Cajas (que han comprado a precio de saldo o puramente simbólico, como el euro que pagó el Sabadell por la arruinada CAM), es decir, les hemos financiado todos con el dinero de nuestros impuestos, sean ahora los mismos que se niegan a financiar la actividad de un partido muy buen pagador, bien gestionado, transparente y con una carrera de éxitos políticos en sus breves siete años de vida. Tampoco que algunos de esos bancos financien de modo opaco a partidos burbuja que no se han distinguido por su lucha contra la corrupción o el "capitalismo de amiguetes". Lógicamente, bussines is bussines, y les prefieren a UPyD porque en concreto Ciudadanos es mucho más comprensivo con su modo de hacer negocios, e incluso propone la clase de reforma fiscal que les gusta (natural si su figura económica, Luis Garicano, es miembro del Consejo de Administración de Liberbank y Manuel Conthe, el otro gurú, niega que la venta de preferentes sin mercado secundario fuera una estafa, y monumental). Pero no está de moda hablar de estas cosas y estas colusiones de interés.
La política democrática bajo el "capitalismo de amiguetes"
Para nadie es un secreto, creo, que las alarmas encendidas con la crisis del bipartidismo -que una vez más previó UPyD en primer lugar- en el mundo de las finanzas, especialmente con el en apariencia imparable ascenso de Podemos, ha llevado a que el dinero procure reorganizar el mapa de partidos de un modo favorable a sus intereses conservadores. Las evidencias están a la vista.
Podemos fue lanzado desde uno de los principales Grupos mediáticos españoles a petición del PP, que con su habilidad para jugar a aprendiz de brujo y salir escaldado, vio en la hueste de Pablo Iglesias un rival a medida que potenciar desde los medios amigos para erosionar al PSOE e IU. Y así el famoso Iglesias dio el salto de La Tuerka y TV13 a La Sexta y La Cuatro. Cuando el PP envió el mensaje de que ya bastaba, fueron las TVs privadas las que respondieron que Pablo Iglesias conseguía estupendos shares y que no pensaban perder audiencia así como así en benificio de la competencia. Desde luego, a poca habilidad que se tenga, y sin duda Pablo Iglesias ha demostrado tener mucha, es imposible no estar de moda si no se habla de otra cosa que de uno a todas horas en todos los medios, y siempre o casi en tono muy positivo, prácticamente propagandístico.
Tras el turno de Podemos llegó el de Ciudadanos. Basta con repasar las hemerotecas para reconocer la realidad de este relevo. En esta otra respuesta de Osoigo expliqué algo más del porqué del lanzamiento estelar del nada nuevo Albert Rivera y su pequeño partido regionalista catalán (que languidecía en el Parlament pese a su subida a costa del PP y PSC) para convertirlo en unos meses en el partido "centrista" de moda y extenderlo por toda España a toda velocidad, con cheques en blanco mediáticos y sin duda con cheques con muchos ceros a la derecha (abrir sedes céntricas en toda España en un par de meses, y meterse en campañas permanentes de promoción, es algo que cuesta muy caro). Con Ciudadanos, partido de moda, el bipartidismo tiene su recambio, como se está demostrando en Andalucía con el PSOE y quizás en otras CCAA con el PP tras las elecciones de mayo. Lo de siempre pero con otro envoltorio y logo novedoso. O sea, una operación típica de lanzamiento de una moda de consumo de un producto viejo, como el del "yogur griego" para el yogur industrial natural de siempre.
Las modas son pasajeras, los problemas y principios políticos, duraderos
En todo este panorama de refundación del bipartidismo al lampedusiano estilo Príncipe de Salina ("cambiar todo para que todo siga igual"), con dos bloques capaces de pactar entre ellos que sustituyen a los dos partidos, de PP-PSOE a PP-C`s y PSOE-Podemos, el único partido que parece sobrar es UPyD. No nos dejamos guiar por las modas, no estamos de moda, han hecho lo posible para hundir nuestra reputación y marca (a base de brutales ataques personales contra Rosa Díez, ya que no han podido encontrar nada más, como corrupción o escándalos), y estamos empeñados en hacer de la política democrática una actividad limpia, decente y transparente, en la que pueda participar activamente cualquier ciudadano capaz y no solo los profesionales del trilerismo, más o menos fotogénicos.
Por tanto, al margen de los resultados de mayo, UPyD seguirá trabajando pero no para estar de moda (estupendo si llegamos a estarlo, claro), sino para conseguir que en España haya una democracia avanzada, con igualdad de oportunidades y libertades garantizadas, con un modelo económico innovador y competitivo, y con todo lo necesario para conseguir estas metas: división de poderes, justicia independiente, transparencia, buena educación y ciudadanía exigente y participativa. Es decir, con decencia y progreso.
Igual tardamos muchos años en que estos objetivos y valores se pongan de moda, y antes deben ponerse en evidencia modas populistas que no conducirán sino a repetir los viejos errores. No tengo duda de que muchos seguiremos y seguirán adelante con el proyecto de UPyD, que no está ligado de modo determinante ni a resultados electorales ni a personas concretas, para cuando llegue su momento histórico, es decir, para que la ciudadanía cuente, cuando decida hacerlo, con un partido capaz de llevar a cabo esas transformaciones políticas que nada, pero nada, tienen que ver con modas de usar y tirar.
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La irrupción de Podemos y después Ciudadanos ha dejado en una mala posición a UPyD. En los tiempos que corren, un buen resultado pasa por capitalizar el descontento ciudadano y conseguir cambiar las cosas desde las instituciones. Parece que su formación no va a hacer ni lo uno ni lo otro. ¿Cómo ve el futuro? ¿Hay razones para ser optimistas?