Pregunta para Parlamento de Canarias
Soy Cecilia, tengo 28 años y la Enfermedad de Lyme. Tuve que irme a Bélgica para recibir un tratamiento. ¿Cuándo prepararán a la Salud Pública para poder detectar y tratar esta enfermedad?
Mi nombre es Cecilia, tengo 28 años, soy de Gran Canaria y padezco Enfermedad de Lyme Crónico, una enfermedad causada por la bacteria Borrelia, trasmitida generalmente por la picadura de una garrapata, aunque también por otro tipo de insectos. Se estima que en Estados Unidos hay más de 300000 casos anuales, pero aquí en España esta enfermedad es oficialmente inexistente, por lo que no se detecta y no disponemos de estadísticas.
Yo siempre he vivido en una casa de campo, rodeada de animales y naturaleza. En 2012 empecé a tener una especie de “gripe” que me duró de octubre a marzo. Nunca tuve fiebre, pero me sentía agotada, dolorida y tuve amigdalitis. Poco a poco empecé a estar cada vez más cansada, tuve mucha fatiga y confusión mental. Empecé a perder la motivación, a dejar de salir y a no poder pensar con claridad. En 2014 no podía levantarme de la cama.
Empecé a pedir ayuda médica y pasé por un sinfín de especialistas, que siempre decían que no podían hacer nada para ayudarme y lo achacaban a problemas psicológicos. Finalmente fui a una psicóloga, que me dijo que el problema tenía un origen físico, y me recomendó un médico especialista. Después de los análisis, di positivo en la bacteria borrelia, que es la que genera la enfermedad de Lyme. La doctora me preguntó si recordaba haber tenido una picadura en forma de diana o si había pasado mucho tiempo en la naturaleza, y yo recuerdo que me habían picado todo tipo de insectos en el campo, pero nunca le di importancia. Después de haber dado positivo, esta me explicó lo que es la Enfermedad de Lyme, algo que yo desconocía por completo. Me prescribió un antibiótico que hizo que me sintiera mucho mejor durante las siguientes dos semanas, pero posteriormente volví a caer enferma.
Presenté los resultados de los análisis a un hospital público. Decidí verme con uno de los médicos más especializados en infecciones, que negó que existieran casos de la Enfermedad de Lyme crónico en España. No me realizó ninguna prueba, vio mis análisis españoles positivos y me dijo que se cruzarían parametros y sin realizarme ningun tipo de estudio me dio el alta con Síndrome de Fatiga Crónica
Fue en ese momento en que me di cuenta que no había nadie que pudiera ayudarme en España. Junto a mi familia, empezamos a investigar y encontramos al doctor Kenny de Meirleir en Bruselas. Este había estado investigando el Síndrome de la Fatiga Crónica, y se había dado cuenta que el 95% de las personas que lo padecía daba positivo en Borrelia, la bacteria que causa la enfermedad de Lyme.
Nos plantamos tres canarios en Bruselas y fuimos a la consulta del doctor, que me hizo un sinfín de analíticas y me dijo que volviera al cabo de tres meses. Cuando volví, me corroboró que tenía enfermedad de Lyme crónico, tularemia, clamidia y disbiosis intestinal. A partir de ese momento, empezamos toda serie de tratamientos. Hace ya 5 años de esa primera visita, y a lo largo de esos años nos hemos seguido viendo cada 3 meses.
A día de hoy sigo con el tratamiento del doctor Neirleir, y he podido recuperar poco a poco mi vida. Soy profesora de matemáticas y de vez en cuando puedo dar clases. Sin embargo, todavía no soy capaz de poder trabajar a jornada completa, soy persona dependiente pero nadie me lo reconoce porque oficialmente en España la enfermedad de Lyme crónico no existe.
Somos muchas las personas que hemos tenido que viajar al extranjero para optar a un tratamiento que mejorara nuestra salud, pero también son muchas las que no pueden permitírselo y tienen que quedarse en España dejando avanzar la enfermedad. Por parte de la Seguridad Social no he recibido ningún tipo de ayuda, he sentido que se han burlado de mí y me han desatendido por completo.
Aunque mi estado de salud ha mejorado, sé que la borrelia esta cronificada. Si me hubieran detectado a tiempo la enfermedad, se podría haber tratado con antibióticos y estar bien al cabo de un mes. Sin embargo, los médicos españoles no están preparados para detectar el Lyme ni para actuar para ello. Considero vital que los médicos estén mejor formados para tratarla y detectarla, así como la población debe de conocer que esta enfermedad existe para pedir ayuda a tiempo.
Como ahora me encuentro un poco mejor, considero que es mi responsabilidad luchar para que las cosas cambien en nuestro país y evitar que más personas pasen por lo mismo que he pasado yo.
Por este motivo, siendo de Canarias, me dirijo al Parlamento de Canarias para que tenga en cuenta esta situación y prepare al sistema de salud pública para detectar y tratar los casos de la Enfermedad de Lyme.