Pregunta para Parlamento de Catalunya
Soy Dani y tengo una Lesión Medular. ¿Cuándo cumplirán verdaderamente la Ley 10/2014 de accesibilidad en Catalunya, para mejorar nuestra calidad de vida?
Mi nombre es Dani, tengo 34 años y resido en un pueblo cerca de Girona. Actualmente soy deportista y emprendedor. Creo que el mundo todavía no está adaptado para las personas que vamos en silla de ruedas y que debemos de luchar para solventarlo.
En el año 2013, cuando tenía 28 años, tuve un grave accidente de coche viajaba solo, salí de la carretera pero no recuerdo como pasó. El accidente me provocó una lesión medular y tetraplejia, por lo que perdí parte de la movilidad de mi cuerpo. El primer mes posterior al accidente fue duro, no nos vamos a engañar. Tuve que aceptar mi nueva situación y aprender a lidiar con ello. Sorprendentemente, terminé afrontando con optimismo los seis meses de recuperación que tenía por delante: estuve 3 meses en en Hospital Vall d’Hebron, y 3 más en el Institut Guttmann.
Después de mucho esfuerzo, he logrado ser una persona autónoma y he tomado las riendas de mi vida. Actualmente soy emprendedor y practico todo tipo de deporte, como básquet adaptado, jiujitsu adaptado o natación. También soy federado en ajedrez y me gusta practicarlo siempre que tengo tiempo. Me gustan las redes sociales y comparto todas mis actividades en el perfil @wellnessinspires, donde comparto todo lo que hago, para inspirar a la demás gente y demostrar que la única discapacidad es una mala actitud.
No obstante, aunque yo me he adaptado a esta nueva vida, parece que el mundo sigue sin adaptarse a las personas que nos desplazamos en silla de ruedas. Actualmente nos encontramos con un sinfín de barreras arquitectónicas en las principales ciudades de Catalunya, así como en los pueblos, que limitan nuestra movilidad.
Aunque en el año 2014 se aprobó la Llei d'Accesibilitat 13/2014 en Catalunya, los ciudadanos seguimos encontrándonos con obstáculos allí donde vayamos.
Desde barreras arquitectónicas urbanísticas, como escalones, aceras estrechas por las que no podemos pasar. También hay las barreras arquitectónicas de edificación, donde en ciertos edificios no tenemos acceso. Por ejemplo, bares o restaurantes con el baño en el primer piso, edificios sin ascensor o sin rampa. En el transporte público también tenemos cierta dificultad, sobre todo en el metro de las ciudades.
Todas estas barreras arquitectónicas impiden o dificultan nuestra independencia. La Ley 13/2014 no se cumple en absoluto, y eso repercute en nuestra calidad de vida. Hay espacios públicos y privados que no cumplen la normativa, y no se hace nada para solventarlo. No sirve de nada tenerla si esta no se cumple.
Por este motivo, siendo de Girona, me dirijo a los miembros del Parlament de Catalunya para que implanten medidas para garantizar verdaderamente la Ley13/2014. Garantizar nuestra independencia y autonomía es la clave para lograr una sociedad inclusiva.