Hoy estamos aquí para solicitar un control sin muerte de la población de cotorras madrileñas. Venimos a dar voz a las aves que, si nada cambia, van a ser capturadas y sacrificadas con dinero público en la capital de España.

Desde el Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad del Ayto de Madrid, se ha puesto en marcha un contrato de casi 3 millones de euros para exterminar 12.000 cotorras argentinas y de Kramer.

Queremos que nuestros impuestos se inviertan en reducir la población, pero sin maltrato animal. Sin sufrimiento ni exterminio. La media de dotación económica por cotorra gestionada es de 250 euros por individuo. La gestión ética sin sacrificio para esterilización y otras medidas de control de natalidad supondría un coste competitivo (30 € por individuo) con respecto a este y sería más eficaz a medio plazo, como demuestran ciudades como Valencia o Barcelona donde ya se lleva a cabo una gestión ética de sus aves.

Solicitamos que Madrid invierta este mismo dinero público en una gestión ética que controle y disminuya la población de cotorras, pero sin muerte de sus individuos. El ayuntamiento de Madrid lleva más de 30 años ignorando este problema y su negligencia administrativa nos sitúa en la situación actual: ahora las aves lo han de pagar con su vida. No se ha controlado el comercio ni la tenencia de estos loros, no se han tomado medidas cuando se conoce el problema desde hace décadas, hasta llegar a este punto lamentable. Se ha de actuar, pero de manera ética, como exigen la mayoría de los ciudadanos.

Llevamos meses realizando numerosas acciones ante el Ayto de Madrid; con reuniones, llamadas... exigiendo que el Ayto. de Madrid paralice el actual contrato de exterminio y preparare uno alternativo sin sacrificio que sea ético de principio a fin. Sin embargo, el ayuntamiento sigue haciendo oídos sordos a los deseos de sus ciudadanos. Siguen primando el lucro de empresas privadas y las soluciones rápidas y no sostenibles a la protección animal y a la búsqueda de resultados eficaces en el tiempo. Exterminar animales para controlar la población, dentro de un problema global, sólo es un parche que se aplicará cada año, pero que no solucionará el problema a largo plazo.

La gestión ética obtiene resultados más lentos, pero que se mantienen en el tiempo. Es un caso similar al de la lucha por la gestión ética de colonias felinas, cuyo exterminio sistemático durante 30 años no sirvió para nada, sólo para asesinar miles de gatos al año en Madrid capital. Desde que la gestión ética de las colonias de gatos está activa, los resultados son palpables pues hay menos gatos, están más sanos y han disminuido los problemas de cohabitación. Se detuvo así con la gestión ética el bucle de maltrato animal por parte de las llamadas empresas de control de plagas.

Desde los colecitvos EFAM (Ecofeministas Antiespecistas Madrid y MALP (Mis Amigas Las Palomas) queremos dirigirnos a los políticos del Ayuntamiento de Madrid para preguntarles por qué no se aplican métodos de éticos de control de las cotorras en nuestra ciudad.

 Tras el temporal Filomena la población de las cotorras se ha visto mermada y el censo de 2019 de 13.000 individuos es más que incierto. Por tanto, dada la situación catastrófica de la ciudad de Madrid y de su fauna urbana autóctona así como su flora, consideramos que invertir 3 millones de euros en exterminar estas aves es inaceptable. Aún más sin conocer la población actual que requeriría un nuevo censo y mucho menos presupuesto.

La inversión de tres millones de euros sin conocer estado actual de la población y con la necesidad urgente de inversión en recuperación de fauna y flora autóctonas, podría considerarse prevaricación de fondos públicos del Ayto. de Madrid. Un capital que pertenece a todos los madrileños y que no puede invertirse en maltrato animal y derroche en muerte de un número incierto de animales.

Reclamamos la anulación del contrato del Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad y la creación de un grupo de trabajo donde toda la sociedad civil pueda participar en la gestión sin muerte de disminución de la población de cotorras para la generación de un nuevo expediente de contratación de servicios que control de la población de cotorras sin muerte así como se impulse la fauna autóctona en aras de preservar la biodiversidad madrileña.

Tenemos poco tiempo, el Ayuntamiendo ya ha concendido el contrato de exterminio de estas aves a la empresa UTE MATINSA - DYCSA, pero no nos rendimos, y pedimos el apoyo de toda persona que esté en contra de esta masacre.

Son nuestras vecinas y masacrarlas perpetúa el mensaje del Gobierno de Madrid que permite el maltrato animal, pues al parecer éste siempre prima en sus líneas de actuación sobre la fauna urbana.

Os dejamos la Guía de Gestión Ética de Cotorras así como un ejemplo de pliego de prescripciones técnicas para su contrato desde la municipalidad.