Mi nombre es Ferran Jaume Navarro y estoy buscando a mi gemelo.

Nuestra madre quedó embarazada, y durante todo el proceso fue tratada por un ginecólogo que le negó reiteradamente que tuviese un embarazo gemelar, a pesar de sus sospechas debido al tamaño de su tripa. El 8 de julio de 1977, el día del parto, le atendió una comadrona y un ginecólogo diferentes a los que habían estado presentes en el resto del embarazo. En el parto, nazco primero yo, Ferran, después, nació otro niño cuya supuesta muerte se produjo tras el alumbramiento, por vuelta de cordón en el cuello. Nuestra madre solo recuerda el momento del nacimiento del primer niño y que le sedaron tras el primer nacimiento, sin saber el motivo. Además, recuerda haber despertado tres horas después desde el comienzo del parto. Nunca pudo ver a su bebé.

Desde nuestra familia buscamos encontrar a su hijo, nuestro hermano, y que por fin puedan conocerse.

Tras esta supuesta muerte, nadie pudo ver al bebé, solo nuestro padre desde lejos. Tampoco se utilizó el nicho que teníamos en propiedad como familia. No obstante, el hospital se encargó de enterrarlo en el mismo cementerio, 3 días después, sin constar en los registros del cementerio la procedencia del cuerpo.

Las sospechas de nuestra madre se han mantenido latentes durante muchos años. Son muchas cosas de las que no encuentra el sentido; que no pudiera ver al niño, que la sedaran, que le atendieran profesionales diferentes, que no se utilizara el nicho… 

Por todos estos aspectos, sospechas y dudas desde la familia presentamos hace meses un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional con el único objetivo de que nuestra madre pudiera encontrar al bebé y conocerlo. Sin embargo, el Tribunal ha desestimado el recurso, justificando dicha decisión en la “ausencia de especial trascendencia constitucional”. El juzgado de instrucción y la Audiencia Nacional nos han dejado en un estado total de indefensión y ya hemos agotado todas las instancias a nivel nacional. Es necesario destacar que al no haberse producido una investigación, se vulneran los derechos fundamentales recogidos en el artículo 24 de la Constitución Española y el 13 del Convenio Europeo de DDHH. Ahora, estamos estudiando la acción ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Nuestra última esperanza ahora son los bancos de ADN, un recurso poco conocido en España, pero que ha demostrado ser tremendamente efectivo en países como Argentina para encontrar víctimas de bebés robados. Aunque en España no existe un banco de ADN estatal (su puesta en marcha está prevista en la nueva ley de Memoria Democrática), existen servicios autonómicos en algunas Comunidades Autónomas. 

Toda la familia nos hemos realizado análisis de ADN en el Servicio de Secuenciación de la Fundación Fisabio, dependiente de la Conselleria de Sanitat Universal i Salut Pública, de la Comunidad Valenciana. Este servicio, ya ha empezado a encontrar coincidencias en casos de bebés robados en esta Comunidad y, ahora mismo, es la única esperanza que tenemos para encontrar nuestro hermano. 

Para poder hacerse las pruebas de ADN en la Comunidad Valenciana, basta con ponerse en contacto con las asociaciones de bebés robados, Asociación de Víctimas Niños Robados de Alicante (AVA), la Plataforma Internacional de Víctimas por Desapariciones Forzadas Infantiles ‘Te estamos buscando’, la asociación SOS Bebés Robados de València o SOS Bebés Robados de la Comunidad Valenciana, entidades que gestionan la documentación necesaria para proceder a la recogida de muestras de las personas interesadas.

Desde la familia hemos creado toda esta campaña con el objetivo de encontrar a nuestro hermano y poder poner en el foco mediático la problemática de los bebés robados durante y después del franquismo. También, queremos aprovechar esta acción para dirigirnos al Congreso de los Diputados y reivindicar la necesidad de una ley específica de bebes robados que ampare a las familias afectadas y que no sea únicamente algo que quede desdibujado dentro de la Ley de Memoria Democrática. 

Nuestra madre está ya muy mayor, llevamos muchos años arrastrando estas sospechas. Solo queremos dar con la verdad, y para ello, necesitamos que nuestra historia llegue lo más lejos posible. 

Por último, si conoces a alguien como Ferran, o tú mismo te pareces a él, contacta con nosotros. 

Firma para poder dar a conocer nuestra historia.